Desde que comenzó la pandemia y hasta este viernes 21 de enero, la covid-19 tocó la puerta de 67 costarricenses con 100 o más años de edad, según los datos oficiales del Ministerio de Salud. De acuerdo con esa información, la persona más longeva en vivir con la enfermedad tenía 113 años cuando se infectó en marzo de 2021, dos semanas después ya se registraba como recuperada.
De estos individuos, 45 ya se recuperaron, 17 fallecieron —el mayor tenía 103 años— y cinco se infectaron hace poco y se contabilizan como casos activos. El mayor de estos últimos tiene 105 años, ninguno de ellos se reporta en una unidad de cuidado intensivo (UCI).
Ellos son parte de los 40.160 adultos mayores que se han infectado con este virus en los últimos 22 meses.
LEA MÁS: Con ómicron, Europa podría entrever el final de la pandemia
¿Dónde están?
Estas 67 personas se ubican en 53 distritos diferentes de 29 cantones de las siete provincias. Los cinco casos activos en este momento están en las provincias de San José, propiamente en San Antonio de Alajuelita y Patalillo de Coronado; en Heredia, en el distrito central de Santa Bárbara; y en Puntarenas, en los distritos centrales de Golfito y Parrita.
La provincia que acumula más de este tipo de casos es San José con 25: dos activos, 14 recuperados y 9 fallecidos. Le sigue Alajuela con 16: 13 recuperados y 3 fallecidos. Estas dos provincias agrupan tres de cada cinco casos en centenarios, y también son las de mayor población nacional. El cantón con mayor incidencia es San José, con 12 infectados.
Guanacaste y Cartago son las que menos registran, con tres cada una. Esta última provincia es la única que no reporta fallecimientos, estos tres centenarios (uno de El Guarco y dos del cantón central) se recuperaron satisfactoriamente. Guanacaste sí registró un fallecimiento en el distrito central de Nicoya.
Por su parte, en Heredia se han recuperado cinco centenarios y fallecido dos. En Puntarenas se han recuperado cuatro y ha fallecido uno; esta misma cifra se observa en Limón.
LEA MÁS: Enfrentamientos durante protesta contra restricciones por covid-19 en Bélgica
Covid-19 en centenarios
Hay cinco casos activos, 45 recuperados y 17 fallecidos.
FUENTE: MINISTERIO DE SALUD || / LA NACIÓN.
LEA MÁS: Mecanismo Covax abre un nuevo frente para acabar con la pandemia de covid-19
Otros datos
En términos generales, los contagios en centenarios representan solo el 0,01% del total de infectados registrados en el país y el 0,17% de los vistos en adultos mayores.
Sin embargo, si se analiza la proporción solo entre mayores de 100 años, los números aumentan, pues de acuerdo con proyecciones del Instituto Nacional de Estadística y Censo (INEC), en Costa Rica hay 569 personas que superan el siglo de vida, es decir, que el 11,8% de esta población ha dado positivo en los últimos 22 meses.
Hay otra información que no está disponible en los datos que el Ministerio de Salud comparte. Por ejemplo, no se indica cuántas de estas personas son hombres o mujeres y tampoco se menciona la cantidad de días que demoraron, en promedio, en recuperarse, o cuántos han necesitado de un internamiento. Tampoco se conoce el estatus de vacunación ni si han pasado por la enfermedad más de una vez.
LEA MÁS: ¿Qué es la ómicron sigilosa y por qué la ciencia la investiga?
Mayor vulnerabilidad
La letalidad de la enfermedad es alta si se compara con el promedio nacional e incluso con el promedio de los adultos mayores. A nivel nacional ha fallecido el 1,2% de los casos reportados. En los adultos mayores, el 10,6% de quienes se han reportado con la enfermedad ha muerto. En el caso de los centenarios, la letalidad sube a un 25,4%, una cifra que bajó en los últimos meses, pues en marzo de 2021 era del 28,6%.
No obstante, 67 casos sigue siendo un número muy pequeño y una sola persona más recuperada o una sola más fallecida, haría gran diferencia en el índice de letalidad. Este tipo de indicadores (letalidad y tasa de recuperación) son más precisos cuántas más personas hay.
Estos números no son de extrañar en una población tan longeva. Conforme envejecemos, el sistema de defensas también envejece y no funciona igual en una persona de 30 o 40 años como en una persona de 80 o 90 años, mucho menos en alguien de más de 100 años. Es un proceso biológico normal que sucede en todos los seres humanos que se llama inmunosenescencia. Conforme envejecemos, nuestras defensas no responden igual ante ningún patógeno.
Esto nos lleva a dos procesos: uno, enfermar de mayor gravedad cuando nos enfrentamos a un patógeno, y dos, que a la hora de recibir cualquier vacuna no tengamos las mismas armas para construir nuestra respuesta y atacar al “invasor”. Tenemos armas, sí, pero no en la misma calidad ni cantidad, y como “soldados” nos hemos vuelto más torpes para usar dichas herramientas.
La geriatra costarricense Yalile Muñoz lo resume así: “La respuesta es más lenta y dura menos. Dura más en conseguirse y el tiempo que duran los anticuerpos es más corto”.
LEA MÁS: Vacunas muestran alta eficacia contra casos graves de ómicron, según datos de EE. UU.
Evolución
El 26 de julio de 2020 fue la primera vez que el país informó de un caso de covid-19 en una persona de 100 años, más de cuatro meses y medio después de la llegada de la enfermedad al país.
El primer fallecimiento se reportó el 12 de agosto y la primera recuperación el 2 de setiembre.
Las primeras vacunaciones en este grupo de edad se dieron en la última semana del año 2020.
LEA MÁS: ‘Deltacron’, la variante de coronavirus que nunca existió