Las mujeres que tienen una mala alimentación antes de quedar embarazadas poseen hasta un 50% más de probabilidades de tener un parto prematuro respecto de aquellas que consumen una dieta saludable.
A esta conclusión llegaron investigadores de la Universidad de Adelaide, en Australia, luego de analizar los patrones dietéticos de más de 300 australianas.
Específicamente, ellos vieron que las que comieron una dieta alta en proteínas, granos enteros, verduras y frutas antes de quedar embarazadas tenían menos probabilidades de tener un parto prematuro respecto de quienes tenían una alimentación alta en grasas saturadas y azúcar.
“Es importante consumir una dieta saludable durante el embarazo, pero también antes de quedar encinta, para que tanto la madre como el bebé se beneficien”, dijo la autora principal del estudio, Jessica Grieger, en el sitio de la universidad.
Recordó que el nacimiento prematuro es la principal causa de enfermedad y muerte infantil, así como que ocurre en aproximadamente uno de cada 10 embarazos en todo el mundo.