El año 2023 ya contabiliza más del triple de los casos de hepatitis que se reportaron para este mismo momento del 2022 (semana 27 de 52). El Ministerio de Salud alertó la mañana de este 28 de julio de que se pasó de 323 casos a 1.009, un incremento del 212%.
La hepatitis es una enfermedad inflamatoria que afecta el hígado. Dentro de sus síntomas destacan coloración amarillenta de la piel y los ojos, orina oscura, fatiga extrema, náuseas, vómitos y dolor abdominal. La infección crónica puede conducir a cirrosis, falla hepática o cáncer de hígado.
Hay varios tipos de hepatitis, ya que no todas tienen las mismas causas. Infecciones virales, bacterianas, inmunitarias o el contacto con tóxicos pueden desencadenar la inflamación en el hígado.
Del total de casos reportados este año, 838 (83,05%) corresponden a hepatitis A, la cual es la más común entre los costarricenses. La hepatitis B registra un total de 101 casos (10% ). Además, se contabilizan 70 casos de hepatitis sin clasificar (6,94%).
Este virus provoca brotes en lugares donde las medidas higiénicas son deficientes o inexistentes. La infección se produce, principalmente, cuando una persona sana entra en contacto con superficies contaminadas con materia fecal de un individuo enfermo y luego lleva las manos a la boca, o cuando las heces de personas infectadas contaminan el agua o alimentos que son posteriormente ingeridos por otros.
El Ministerio de Salud solicita aumentar las medidas higiénicas, evitar el contacto con personas con síntomas y acudir a un centro de salud en cuanto comiencen las primeras manifestaciones de la enfermedad.
En las últimas semanas se han registrado brotes de hepatitis A. Uno de estos se detectó en las oficinas de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).