Fumar durante el embarazo puede causar más daños al bebé de los que anteriormente se creía.
Una revisión de más de 100 estudios realizados en los últimos 50 años, detalló que el tabaquismo en este período no solo causa un nacimiento prematuro, sino también defectos cardíacos, problemas en los pulmones, malformaciones en órganos importantes, partes del cuerpo que no terminan de formarse, desórdenes gastrointestinales y malformaciones en la cara.
“Estas conclusiones no se tomaron a la ligera. Hicimos un análisis que tomó en cuenta un total de 173.687 casos de daños a la salud del bebé porque su madre fumaba, contra 11,7 millones de controles”, comentó, mediante un comunicado de prensa, Allan Hackshaw, uno de los investigadores.
El doctor Michael Katz, otro de los científicos participantes indicó que un bebé en el vientre de una mujer fumadora está expuesto a químicos como nicotina, monóxido de carbono y alquitrán que pueden quitarle al bebé el oxígeno que necesita para su desarrollo.
Los científicos indicaron que el fumado también puede causar daños serios a la salud de la mujer, como embarazo ectópico (cuando el bebé comienza a desarrollarse fuera del útero), sangrado vaginal, placenta abrupta (cuando la placenta se “abre” antes del momento del parto), o placenta previa (cuando la placenta se ubica en la parte inferior del útero y pueden producirse sangrados).
Además, una mujer que fuma tendrá mayores dificultades para quedar embarazada de nuevo.