Costa Rica combate activamente focos de malaria o paludismo en territorios cercanos a la frontera con Nicaragua, en el Pacífico central y, más recientemente, se dio la alerta de su reaparición en varios sectores de Limón.
¿Cómo se contagia esta enfermedad y qué podemos hacer para prevenirla? Comencemos por decir que la malaria es una enfermedad causada por un parásito, pero también es una enfermedad vectorial, es decir, requiere de un agente transmisor, en este caso, un mosquito.
Más específicamente, la malaria o paludismo es causada por parásitos del género Plasmodium. Es transmitida por mosquitos del género Anopheles. Su transmisión es muy similar a la de otras enfermedades vectoriales, como el dengue o zika: si un mosquito pica a una persona con malaria, se convertirá en un portador del parásito, y cuando pica a otras personas las infectará.
En otras palabras, se requieren dos requisitos para que una persona se contagie de malaria: entrar en contacto con el mosquito Anopheles y que este insecto porte un parásito Plasmodium. Esta enfermedad no se transmite de persona a persona, como sí sucede con la covid-19 o la influenza.
El género Plasmodium tiene varias especies, cinco afectan a los seres humanos. En Costa Rica circulan las dos más comunes a nivel mundial: la Plasmodium falciparum, que es la principal en suelo tico, y la Plasmodium vivax. De acuerdo con Salud, este brote en la provincia del Caribe es ocasionado por la P. falciparum.
El mosquito transmisor tiene un ciclo de actividad, se da, principalmente, entre las 5 p. m. y las 6 a. m., esta es la hora en la que más tenderá a picar. Aunque la enfermedad no se transmite de persona a persona sí es usual que el zancudo pique a más de una persona por ocasión, y si hay varios individuos en un solo lugar, podría infectar a varios. Por esta razón, las autoridades de salud hacen un rastreo y monitoreo de los contactos de los pacientes.
LEA MÁS: Editorial: El desafío de la malaria
LEA MÁS: ¿Qué se sabe del brote de malaria en Limón?
La ruta de la enfermedad
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) señala que los primeros síntomas del paludismo suelen darse entre 10 y 15 días después de la picadura de un mosquito infectado. La forma de detectarlo es a través de una prueba de sangre. Hay pruebas rápidas que pueden dar un diagnóstico inicial en cuestión de minutos.
Tanto el P. falciparum como el P. vivax actúan igual: ingresan al hígado y migran a la sangre, donde infectan los glóbulos rojos. Puede causar fiebres muy altas, escalofríos y anemia; los primeros síntomas surgen de forma repentina. En los casos más graves, que se dan si el paciente no es tratado a tiempo, destruye células sanguíneas y daña circulación, hígado y riñones.
“La infección por falciparum es la más fatal si no es tratada a tiempo y podría tener serias complicaciones renales y cerebrales, e inclusive la muerte”, expresó en una entrevista anterior, Gabriela Rey, oficial técnica para malaria y otras enfermedades por vectores de la OPS.
Por eso se pide a las personas estar atentas a las manifestaciones del paludismo. Estas son fiebre, acompañada por al menos uno de estos síntomas: escalofríos, sudoración, dolor de cabeza y dolor muscular. Esto debe hacerse especialmente si los individuos viven o estuvieron de visita en zonas donde hay focos maláricos, como Limón, el territorio fronterizo con Nicaragua (principalmente Los Chiles) y el Pacífico central.
El tratamiento de esta enfermedad, que consiste en dos medicamentos, se otorga independientemente de si el paciente está asegurado.
LEA MÁS: Zona norte pide brigada especial para contener malaria
Situación en Limón
A la semana epidemiológica número 15 (que va de este 9 al 15 de abril) se reportan, solo en el brote de Limón 97 contagios: 56 pacientes masculinos y 41 femeninos. Rodrigo Marín Rodríguez, director de Vigilancia de la Salud del Ministerio de Salud, señaló que, de los casos reportados, 42 corresponden al cantón de Limón, 52 a Pococí, dos casos a Matina y uno a Siquirres.
En estos días, funcionarios del Ministerio de Salud y de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) realizan labores de barrido de visita casa por casa para detectar personas con síntomas, tomar muestras de pruebas rápidas, suministrar medicamentos de manera profiláctica, entregar toldos y fumigar.
A través de un comunicado de prensa Salud indicó que más de 50 funcionarios de la CCSS y de Salud se trasladaron a Limón para contener el brote y evitar nuevos casos. Con estos refuerzos, a partir del miércoles 12 de abril de 2023, se intensificará la búsqueda activa sistemática de casos de malaria, priorizando la localidad de Moín, durante dos semanas, mediante el trabajo coordinado entre Ministerio y CCSS, con el apoyo de la Comisión Municipal de Emergencias.
En los barrios los barrios de 9 millas y 12 millas (más conocidos como el sector “La Playa” en Moín) se dará tratamiento profiláctico supervisado por colaboradores de Salud.
También se harán pruebas rápidas para el diagnóstico de malaria (PDR) en todos los establecimientos de salud de la CCSS en la provincia de Limón. Para ello se disponen de 20.000 unidades. Estas pruebas también se aplicarán en las comunidades con casos positivos.
LEA MÁS: Malaria: el otro gran enemigo en el borde fronterizo
Prevención
Al igual que la hembra del Aedes aegypti, transmisor del dengue, las hembras de los mosquitos del género Anopheles depositan sus huevecillos en reservorios de agua limpia.
Por ello, deben tomarse las mismas precauciones ya conocidas para evitar el dengue, es decir, eliminar cualquier recipiente que pueda acumular agua limpia, como baldes, llantas, floreros, entre otros.
“Hay que volcar y disponer adecuadamente de objetos que acumulen agua estancada y que puedan servir a la hembra del mosquito para reproducirse. Esto es fundamental para evitar enfermarnos por malaria”, enfatizó Carla Alfaro Fajardo, directora de Red de Servicios de Salud de la región Huetar Atlántica de la CCSS.
Dentro de las recomendaciones también están utilizar repelente, colocar mosquiteros, poner cedazos en puertas y ventanas y cubrirse la piel. También se aconseja tratar de no vestir ropa oscura, porque esto hace que los zancudos se aproximen más a las personas.
El que se vean brotes en la zona norte y el Caribe no quiere decir que el resto del país esté exento de la aparición de la enfermedad. En este momento hay dos focos en el Pacífico central y uno en el Pacífico sur, los cuales emergieron en 2022. A esto se le debe añadir que se realizan labores de investigación para determinar si en La Cruz, y en La Loma, Cañas, ambas localidades en la provincia de Guanacaste, hay posibles nuevos focos.
Además, el epidemiólogo Melvin Anchía recordó que el mosquito vive desde los 0 metros sobre el nivel del mar hasta los 600. Incluso, en situaciones inusuales, podría viajar a mayores alturas. Por eso, se pide a la población conocer la enfermedad y también estar atentos a los posibles síntomas.