En las primeras 17 semanas del año (hasta inicios de mayo), la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) ha atendido a 1.500 personas con sospechas de dengue. Si se compara este periodo con las primeras 17 semanas de 2021 y 2022, representa un aumento del 32%.
Las autoridades estiman que el número de casos crecerá conforme se adentre la época lluviosa.
La complicación que se da este año es la circulación activa de cuatro serotipos de dengue. El dengue tipo 4, se vio en el país en setiembre de 2022 por primera vez en 20 años y se mantiene circulando activamente. Este serotipo preocupa a los especialistas, porque había estado tanto tiempo ausente que la población no tiene tantas defensas contra él.
La institución señaló que una persona puede infectarse al menos cada seis meses por cada uno de los cuatro serotipos, con el riesgo de que las infecciones subsiguientes pueden ser de mayor gravedad. Esto es así porque cada vez que volvemos a exponernos a otro serotipo del dengue distinto al que nos enfermó la primera vez, las defensas actúan con mayor intensidad, lo que podría intensificar los síntomas y desencadenar un dengue grave (anteriormente llamado “dengue hemorrágico”).
En acción
Catalina Ramírez Hernández, epidemióloga Coordinadora de Enfermedades Transmisibles-Vectoriales de la CCSS, aseguró que la institución se mantiene alerta para detectar brotes y atender casos. No obstante, recordó a las personas su responsabilidad de eliminar los criaderos en los que la hembra del mosquito deposita sus huevecillos y conocer los síntomas.
Para Ramírez, hay que dejar de visualizar las canoas, llantas y baldes como los únicos depósitos de huevecillos, ya que también hay otros como la taza del alimento de la mascota, tapas de refresco, maceteros, plásticos, algunas plantas ornamentales, floreros, etc.
Dentro de las recomendaciones están las siguientes:
- Mantener el aseo alrededor del hogar para evitar que las mosquitas depositen sus huevecillos.
- Eliminar correctamente los desechos sólidos y los posibles depósitos de agua limpia sin importar cuán pequeños sean.
- Cubrir, vaciar, volcar, agujerear y limpiar al menos cada 3 días los recipientes donde se almacena agua para uso doméstico.
- Coordinar con el Ministerio de Salud el control vectorial que corresponde a su localidad de acuerdo con la situación epidemiológica
- Utilizar medidas de protección personal en el hogar, como cedazos en las ventanas, usar ropa de manga larga, repelentes, materiales tratados con insecticidas, espirales y vaporizadores.
También es necesario estar pendiente de los siguientes síntomas:
- Fiebre, con temperaturas superiores a los 38 °C.
- Dolor de cabeza muy intenso.
- Dolor detrás de los globos oculares.
- Dolor muscular y de articulaciones.
- Náuseas y vómitos.
Ramírez comentó que estas manifestaciones se presentan al cabo de un periodo de incubación mínimo de 3 a 7 días, pero que puede prolongarse hasta 14 días después de la picadura de un mosquito infectado. Estos síntomas por lo general duran entre 7 y 10 días.