Ciudad de México. Estudios recientes han demostrado que la diabetes es una importante causa de insuficiencia renal. ¿Por qué?
Empecemos por explicar que los riñones son órganos dentro de los cuales hay millones de diminutos vasos sanguíneos (capilares) que actúan como filtros. Su labor es eliminar productos de desecho de la sangre.
Ahora bien, en un paciente con diabetes, este sistema de filtrado deja de funcionar correctamente y dicha situación puede ocasionar daño a los riñones y hacer que fallen. Cuando estos colapsan, pierden su capacidad de eliminar esos productos de desecho y se produce una nefropatía (enfermedad renal).
De acuerdo con Víctor Rincón Ponce, director médico asociado del área metabólica de la compañía MSD en México, "la diabetes puede dañar este sistema. Un alto nivel de glucosa en la sangre hace que los riñones se dañen, el primer indicio de esto es un aumento en la filtración de sangre. Esta hiperfiltración afecta los “filtros” (glomérulo).
Después de algunos años, el daño es tan severo que empiezan a existir fugas de elementos tan grandes como las proteínas y se puede detectar estas proteínas en la orina. La presencia de una pequeña cantidad de proteína en la orina se denomina microalbuminuria.
Cuando se diagnostica la nefropatía en las fases iniciales varios tratamientos pueden ayudar a que no empeore.
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Recordemos que con el tiempo, el estrés del funcionamiento excesivo hace que los riñones se dañen todavía más y filtren cada vez menos. Entonces, se comienzan a acumular productos de desecho en la sangre. Si esto continúa es probable que se produzca el fallo renal, que es muy grave. Una persona con este mal necesita un trasplante de riñón o que se le filtre la sangre con una máquina (diálisis).
El primer síntoma de nefropatía a menudo es la acumulación de líquido. Otras señales incluyen la pérdida de sueño, falta de apetito, malestar estomacal, debilidad y dificultad para concentrarse.
¿Como evitar todo esto? El control estricto de la glucosa en la sangre y presión arterial son vitales en el tratamientos para la nefropatía, explicó Rincón Ponce, director médico Asociado de MSD México.
La presión arterial tiene un efecto considerable en la velocidad con la que avanza la enfermedad. Incluso un leve aumento en la presión arterial puede hacer que la nefropatía empeore rápidamente.
Cuatro maneras de reducir la presión arterial son: perder peso, comer menos sal, evitar las bebidas alcohólicas y el tabaco, y hacer ejercicio de manera regular.