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Una guanacasteca que nació sin vagina debido a un problema congénito ahora tiene una gracias a una cirugía realizada en el Hospital La Anexión, en Nicoya, con el apoyo y guía de profesionales del Calderón Guardia.
Esta mujer vino al mundo con una condición llamada anegesia vaginal, que le impidió desarrollar el canal vaginal y el útero. Por ello, requeria la “construcción” de este tejido.
Anteriormente, este procedimiento se había realizado en hospitales nacionales como el Calderón Guardia y San Juan de Dios, pero esta es la primera vez que se lleva a cabo en un hospital regional.
“La muchacha quiere estar ahí, cerca de su casa, con su familia El que tenga que estar más de una semana hospitalizada en San José no la hace sentirse tan cómoda”, apuntó en una entrevista anterior la ginecóloga Rita Peralta, quien lidera estos procedimientos en el Calderón Guardia y en noviembre se refirió al caso de la guanacasteca que estaba en proceso para ser operada.
Precisamente este centro médico josefino es pionero en este tipo de procedimientos en el país. La primer cirugía de neovagina (nueva vagina) la realizó el ginecólogo Juan Bautista Madrigal en el 2005. Desde entonces, los profesionales del Calderón Guardia han realizado 12 procedimientos en mujeres entre los 15 y los 32 años.
Según comentó Anner Angulo, director del Hospital La Anexión, se contó con un equipo multidisciplinario con profesionales de ambos hospitales, que incluyó ginecólogos, anestesiólogos, enfermeras obstetras, enfermeros instrumentistas, psicólogos y nutricionistas.
La coordinación comenzó cuando Keren Porat, ginecóloga del centro médico nicoyano, detectó la anomalía en la muchacha y se puso en contacto con los especialistas del hospital josefino.
Paso a paso
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Desde que los profesionales del Calderón Guardia realizaron su primer procedimiento hace 14 años, han ido depurando sus técnicas y ajustándolas a las necesidades específicas de cada paciente. En este centro médico incluso se diseñó un dispositivo especial con el que realizan las cirugías.
“Nosotros mismos lo diseñamos. Buscamos un material que pudiera ser estéril y se utilizara sin problemas en el cuerpo de la mujer. Fuimos con un mecánico de precisión y nos ayudó a elaborarlo”, destacó Peralta, quien asumió estas cirugías después de la jubiliación de Madrigal.
El dispositivo colocado durante la cirugía abre poco a poco el canal vaginal. La paciente permanece hospitalizada durante ocho días para continuar con la apertura del canal y construcción de su nueva vagina. Además, durante su estancia se le educa sobre cómo debe ser la recuperación y cuidados.
“Con el tiempo vimos que debíamos adaptarlo mejor a cada cuerpo. Hemos tenido chicas pequeñas y delgadas, y otras más bien muy altas, o más gruesitas, teníamos que hacer dispositivos casi que personalizados. De momento hemos visto que la longitud de la vagina sí se ha mantenido similar a lo normal, pero aquí lo más importante es que las mujeres puedan tener una vida sexual satisfactoria, eso no solo se logra con una cirugía, porque la parte emocional juega un rol clave", añadió Peralta.
Por esta razón, Peralta destacó en una entrevista anterior que la valoración y acompañamiento psicológico es vital en este tipo de pacientes y que a ninguna se le realiza la intervención sin antes contar con el visto bueno de psicología.
El proceso no concluye con la dada del alta del hospital, pues la mujer debe dilatar su vagina, es decir, utilizar dispositivos semejantes a un consolador para mantener la apertura del canal vaginal.
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Condición poco común
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La anegesia vaginal es un trastorno poco frecuente, se ve en una de cada 5.000 mujeres. Usualmente estas personas consultan por primera vez en su adolescencia o al final de ella, pues la primera señal de sospecha es que no se ha presentado la menstruación (al no haber útero, no se produce menstruación).
“Si ya a los 15 años no ven que la muchacha tiene la menstruación, es vital que vea un médico. No cabe de excusa que en la familia a todas ‘les vino la regla’ ya ‘viejas’, puede haber otro tipo de trastornos o desajustes hormonales que deben revisarse", expresó Peralta.
Estas pacientes no producen lubricación, pero para los especialistas esta parte no es tan problemática, porque puede solucionarse con geles lubricantes.
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Otros hitos en hospitales regionales
Esta no es la primera vez que los hospitales regionales dan de qué hablar cuando se trata de avances médicos y tecnológicos.
Uno de los hitos más recientes fue el nacimiento de Ana Yanci, María Fernanda y Kimberly Paola Gutiérrez Córdoba en el Hospital San Carlos. Ellas se convirtieron, el pasado 18 de febrero, en el primer parto múltiple en este centro de salud.
Además, en el Hospital Enrique Baltodano de Liberia, en el 2017 se registró una cirugía de cerebro en la que el paciente estaba despierto. Gracias a este procedimiento que anteriormente solo se había hecho en hospitales nacionales, se removió un tumor.
Años antes, en el Hospital San Carlos se implantó un fémur a un joven sufría un cáncer óseo conocido como osteosarcoma, y un implante de este hueso era la única opción para salvar su pierna de una amputación.
