Una investigación determinó que es posible que las personas puedan diferenciar la estatura relativa de los demás solo con escuchar el sonido de sus voces.
Eso sí, el estudio no arrojó la prueba que usted esperaría: las personas no necesariamente identifican las voces más profundas con gente más alta.
Experimentos previos también han sugerido que la gente puede discernir la estatura a través de la voz. El nuevo análisis no solo confirma esta habilidad sino que también señala lo que podría estar dando pistas a los escuchas: el sonido producido en la vía respiratoria inferior, debajo de la manzana de Adán (el pedazo de cartílago que sobresale de la laringe).

La idea, explicó el líder del estudio John Morton, psicólogo de la Universidad de Washington, en San Luis, es similar a lo que sucede cuando alguien sopla aire a través de una botella.
Si la botella es más grande y alta, el sonido resuena más que si la botella es más chica y bajita. Pero contrariamente a lo que sucede con las botellas, la gente no identifica simplemente voces más profundas con gente más alta, indica Morton.
Voces intensificadas. Para el experimento, Morton y sus colegas accedieron a datos del corpus de voz de la Universidad de Washington-UCLA, que incluye voces grabadas y sonidos de vías respiratorias bajas de voluntarios que se obtuvieron midiendo las vibraciones con un instrumento colocado justo abajo de la manzana de Adán.
Después, hicieron que 24 voluntarios escucharan voces grabadas de gente diciendo algunas palabras sin sentido. En su primera actividad, los voluntarios escucharon dos voces y se les pidió que escogieran cuál pertenecía a una persona más alta. En el segundo experimento, a los participantes se les pidió que clasificaran cinco personas por altura con base en su voz.
Luego de analizar los datos, los investigadores hallaron una relación entre las elecciones de voluntarios por los hablantes más y menos altos y ciertos cambios ligeros en las resonancias subglotales, sugiriendo que la gente distinguía la estatura con estos sonidos.
En promedio, la gente acertó 62.7%, significativamente mejor que si solo elegían al azar. “Lo que dice es que es un rasgo humano universal”, dice Morton.
Por supuesto, los voluntarios escuchaban toda la voz de una persona y no solo sus resonancias subglotales, enfatiza Morton. Los sonidos del tracto vocal por arriba de la manzana de Adán también contienen información sobre la altura.
Desenmarañar los efectos de estos sonidos subglotales de otros matices en cada sonido (y demostrar sin lugar a dudas que son responsables de revelar la altura) es desafiante, y requerirá más investigación, agrega.