El cáncer de próstata es el más común entre los hombres costarricenses, y una de las razones es que muchos mitos y temores alejan a los ticos de los consultorios donde podría darse una detección temprana de anomalías en esta glándula.
Datos del Registro Nacional de Tumores señalan que en el 2015, último año para el cual hay datos disponibles, se diagnosticaron 1.005 casos, una tasa de 41,7 por cada 1.000 hombres.
Esta estadística está por encima del promedio mundial de 31,1 por cada 100.000 hombres.
No obstante, eso no quiere decir que en Costa Rica esta enfermedad sea más agresiva, pues razones geográficas y de desarrollo social también podrían explicar los números (en otras naciones se torna más complicado identificar los casos o no se llevan estadísticas rigurosas).
Sin embargo, los mitos siguen siendo una de las razones por las cuales, en nuestro país, la detección tardía se ha vuelto todo un dolor de cabeza para los médicos.
La forma más eficaz de detección se compone de varios exámenes: uno de sangre, un ultrasonido y un tacto rectal. Las primeras dos son algo que no parece incomodar a los caballeros, pero la tercera sí. Sin embargo, este tacto es vital para detectar las dimensiones de la próstata y revisar si hay anomalías en ella.
¿En qué consiste? Con la mano cubierta por un guante, un médico introduce un dedo lubricado por el orificio anal y, a través de la pared rectal, puede sentir la próstata. Cuando está sana, esta glándula se siente suave, como el cartílago de la punta de la nariz; pero, al desarrollar un cáncer, esta es dura al tacto, como una piedra.
El tamaño de una próstata sana es similar al de una nuez.
“Muchos hombres le huyen al examen (tacto rectal), y esto puede pasarles una factura muy cara a su salud. No todo se ve en el examen de sangre (antígeno prostático)”, explicó en una entrevista anterior el urólogo Gonzalo Azúa, especialista en cáncer de próstata.
“Una detección temprana hace que el cáncer pueda tratarse de forma curativa, con radioterapia o con cirugía. Esto mejora las posibilidades de supervivencia y da calidad de vida. Si la detección es tardía normalmente solo puede ofrecerse tratamiento paliativo. Esto no quiere decir que la persona se vaya a morir pronto, pero sí que no puede hacerse mucho por curar la enfermedad y las terapias se enfoquen en reducir el dolor, mejorar la alimentación y las emociones”, añadió.
¿Qué señales notar? Aunque este cáncer es silencioso y no da síntomas, sí hay ciertas señales de sospecha. Por ejemplo, dificultad para comenzar a orinar y disminución en la calidad y cantidad del chorro de la orina. También debe tomarse en cuenta que la edad es un factor de riesgo. Después de los 50 años, es recomendable un tacto rectal por año.
Con motivo del Día Nacional del Cáncer de Próstata (el 11 de junio), las diferentes asociaciones y médicos especialistas llaman a los hombres a dejar atrás los mitos y miedos por el bien de su salud.