"Tener pesadillas de vez en cuando es normal, incluso una cada dos meses, pero si ya está teniendo esta clase de sueños dos veces por semana o más, usted tiene un problema".
De esta forma, Daniel Skenderian, médico estadounidense especialista en fisiología del sueño, describió que las pesadillas pueden no ser un problema en sí, si no más bien un síntoma de un trastorno subyacente.
"Puede ser algún trauma posterior a un evento violento, una muerte, una impresión muy grande, o puede ser producto de un desorden de ansiedad", aseveró Skenderian, "lo principal aquí es encontrar cuál es la causa. Si no se trata la causa, es muy difícil acabar las pesadillas".
El experto estadounidense recalcó que las pesadillas no siempre están relacionadas directamente con el evento sucedido, pueden manifestarse como cualquier forma de mal sueño.
"Algunos sueños pueden ser recuerdos constantes de lo que sucedió, otros, pueden tener cualquier otro tipo de tema, pero el resultado es el mismo: el paciente no tiene calidad de sueño", recalcó.
Para el especialista, normalmente en estos casos el problema no es tan difícil de resolver, pues unas consultas con psicólogo y, en algunos casos, medicamentos, ayudarán al paciente a superar paulatinamente esta condición y sentirse mejor.
El tratamiento es necesario, pues el tener pesadillas muy seguido hace que la persona pase con sueño durante todo el día, no tenga la misma capacidad de reacción, de coordinación ni de toma de decisiones. Además, el miedo constante característico de malos sueños muy constantemente hacen que las personas se atemoricen de la simple idea de ir a la cama, lo que también puede causarles insomnio.