Si siente nostalgia por el pasado, sentirá después optimismo por el futuro.
Así lo aseguran investigadores de la Universidad de Southampton en Inglaterra, quienes explican que, si bien la nostalgia es una emoción que se orienta hacia el pasado, su alcance se extiende hacia el futuro, con una perspectiva positiva.
En el experimento, liderado por Tim Wildschut, pidieron a los participantes recordar un evento nostálgico y escribir sobre él; luego lo compararon con lo escrito por un grupo al que se le pidió recordar y escribir sobre un acontecimiento cualquiera.
“Los relatos nostálgicos contenían una proporción significativamente mayor de expresiones optimistas que las otras historias”, aseguraron los investigadores en el sitio de la universidad.
Otro estudio hizo a unos participantes escuchar una canción nostálgica y a otros, una canción cualquiera. Quienes escucharon la música nostálgica reportaron mayores niveles de optimismo que los que escucharon la otra melodía.
El tercer experimento implicó que los participantes leyeran letras de canciones nostálgicas e indicaran después cómo se sentían. De nuevo, los que leyeron líricas nostálgicas reportaron mayores niveles de optimismo que los del grupo control.
¿Por qué? Wildschut explicó que los recuerdos del pasado pueden ayudar a mantener los sentimientos actuales de autoestima y contribuir así a tener una perspectiva más positiva sobre el futuro.