Es la segunda causa de muerte en el país y una de las enfermedades más comunes. El cáncer se desarrolla por una combinación de factores genéticos, ambientales y de estilo de vida, y no hay forma de prevenirlo totalmente ni de garantizarse que no se sufrirá este mal.
No obstante, sus hábitos pueden hacer que el riesgo de un tumor sea mayor o menor; ese es el mensaje que la Organización Mundial de la Salud ( OMS ) da con motivo del Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer, que se celebra cada 4 de febrero.
Los especialistas son enfáticos en que el fumado, la obesidad, la falta de actividad física y la mala alimentación son relevantes en el desarrollo de ciertos tipos de cáncer.
“Es posible prevenir al menos un tercio de los cánceres más comunes, reduciendo el consumo de alcohol, siguiendo dietas saludables y mejorando los niveles de actividad física. Si se incluye el dejar de fumar, la cifra se acerca al 50%”, cita el documento oficial de la OMS sobre este día.
Riesgo clave. Un estudio de la OMS, publicado en diciembre, señaló que el 4,7% de todos los tumores que se desarrollan en Costa Rica tienen como causa principal el sobrepeso o la obesidad.
Además, hay ciertos tipos de cáncer ya asociados al peso: ovario, útero, garganta, páncreas, seno (después de la menopausia), colon, recto y riñones. En nuestro país, el 14% de estos males tiene como origen el exceso de peso.
“El sobrepeso también aumenta el riesgo de muerte. Si se les diagnostica esta enfermedad a dos personas, una con sobrepeso y otra con peso normal, la que tiene sobrepeso correrá un mayor riesgo de muerte”, comentó Alejandro Calderón, médico del Proyecto de Fortalecimiento de Atención Integral del Cáncer, de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
¿Qué hacer? Para el especialista en movimiento humano, José Ramírez, es vital mantenerse en actividad constante.
“El ejercicio sí ayuda, pero si usted pasa el 80% del día sentado ya le está restando muchos beneficios a ese ejercicio que hizo. Busque levantarse unos cinco minutos cada hora. Si puede, tome llamadas de pie, o levántese y hable con un compañero en vez de mandarle un correo electrónico”, manifestó Ramírez.
La alimentación también es vital. La recomendación es evitar grasas y carbohidratos, y darles lugar todos los días a las frutas, verduras y proteínas, especialmente de carnes blancas.
Lo que no puede controlarse. Hay una parte del cáncer que no puede prevenirse y es la relacionada con los genes y cómo estos afectan a las células.
Según confirmó Luis Bernardo Sáenz, coordinador del Proyecto de Fortalecimiento de Atención Integral del Cáncer, de la CCSS, el hecho de que el ser humano tenga células lo hace susceptible del cáncer, y cuanto mayor es la persona, más susceptibles son sus células.
“Con el cáncer, la reproducción de las células se altera y comienza a darse sin ningún orden. Las células crecen y forman un tumor, estas células no cumplen la función normal y, además, afectan el resto del cuerpo y las defensas. La enfermedad no se limita a la zona del tumor, afecta a todo el cuerpo”, explicó Sáenz.
Ante lo que no puede controlarse, los expertos aconsejan entonces cuidar lo que sí se puede y, por ende, hacer ejercicio, comer bien y no fumar.