En setiembre, Costa Rica realizará una campaña extraordinaria de vacunación contra covid-19, para la cual se ampliarán horarios de atención en los vacunatorios de todas las áreas de salud, y se realizarán visitas a empresas y centros comerciales. Además, en algunas áreas de salud los Asistentes Técnicos de Atención Primaria en Salud (ataps) llevarán vacunas contra covid-19 a las visitas domiciliarias. También se realizarán barridos en sitios prioritarios.
Esta vacunación no está destinada solo a grupos de riesgo, como sucede con las campañas contra la influenza. Cualquier persona mayor de seis meses puede inocularse contra covid-19.
“Podemos llevar equipos vacunadores a las empresas para que todos los trabajadores puedan vacunarse”, manifestó Karla Solano Durán, directora de Servicios de Salud de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
Igualmente, los centros privados también se sumarán a esta iniciativa, aunque no se precisó la fecha en que dará inicio la campaña.
Mary Munive Angermüller, ministra de Salud, destacó la importancia de la prevención.
“Un gramo de prevención tiene muchísimo más peso que un kilo de cura. Sabemos y ya hemos vivido el dolor de un fallecimiento u hospitalización de un ser querido. Las complicaciones de este virus se previenen con algo tan sencillo, como lavado de manos, protocolo de estornudo, de estar alejado de personas con síntomas, pero sobre todo de esta herramienta que tenemos, la vacunación”, afirmó.
Este biológico está disponible en Costa Rica desde abril pasado. Sin embargo, para julio solo se habían administrado el 9,39% de las dosis contra covid-19.
Carlos Jiménez Herrera, director del Hospital Nacional de Niños (HNN), pidió a las familias mantener al día la vacunación de los menores, tanto contra covid-19 como contra influenza. En este momento, el centro médico enfrenta el inicio de pico por virus respiratorios y este servicio ya presenta saturación.
Ni la CCSS ni el Ministerio de Salud han elaborado un estudio sobre efectividad de la vacuna en la población. Sin embargo, si se toma en cuenta la cantidad de hospitalizados en la CCSS según las dosis recibidas, se aprecia que la vacunación sí está correlacionada con menores probabilidades de hospitalización.
¿Cómo es esta vacuna?
La CCSS está utilizando la vacuna Spikevax, de la empresa Moderna. Este biológico se basa en la variante XBB1.5 del virus SARS-CoV-2, causante de la covid-19. Esta no es la de principal circulación en este momento, pero sí ofrece protección contra otras variantes circulantes, como las JN.1, KP.2 y KP.3.
Al igual que las vacunas aplicadas anteriormente, esta se elaboró con la tecnología ARN-mensajero o ARN-m. A la persona se le inyecta una porción de proteína con la variante XXBB1-5. Esta porción de proteína le da instrucciones al sistema inmunitario para producir los anticuerpos que reconocerán al virus y lo enfrentarán en caso de encontrarse con él.
Esta no es la vacuna más actualizada contra covid-19, pero sí la que se utiliza en la mayor parte del mundo. La más actualizada fue aprobada el pasado 22 de agosto por la Agencia de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) y comenzó a administrarse una semana después. En este momento sus existencias son limitadas y está disponible solo en EE. UU., Canadá y algunos países de Europa.
Se aprobaron los productos de los laboratorios Pfizer y BioNTech, Moderna y Novavax. Todos ellos se basaron en la subvariante KP.2, una de las de mayor circulación a nivel mundial en este momento y la que, según los análisis genómicos, es la más circulante en Costa Rica.
Como sucedió con las versiones anteriores de este fármaco, no evita la enfermedad, pero sí sus complicaciones, como hospitalización y muerte.