“¿Para qué ser parte de un comité técnico si los que tienen que asesorarse no se dejan asesorar?”.
Así resumió la viróloga Eugenia Corrales Aguilar, los motivos de su renuncia al Comité Técnico en Infecciones Respiratorias del Ministerio de Salud, a partir de este 16 de enero.
Este grupo está compuesto por científicos de diversas ramas: médicos, epidemiólogos y salubristas públicos quienes, con base en su experiencia, estudian y evalúan la situación de la covid-19 y otras enfermedades infecciosas, como influenza, fiebre amarilla o viruela del mono para brindar informes y dar recomendaciones a las autoridades sanitarias.
Sin embargo, de acuerdo con Corrales, esta asesoría no es escuchada desde que la actual ministra, Joselyn Chacón Madrigal, comenzó su gestión. La especialista asegura que la jerarca ni siquiera se ha reunido con ellos una sola vez en los más de ocho meses que lleva en el cargo.
“Eso deja mucho que decir”, puntualizó la científica en entrevista con La Nación, este martes.
“Mucho de lo que uno hace, que es asesorar técnicamente y estar estudiando para tener toda la información al día, no ha sido valorado en las decisiones del nuevo ministerio”, aseveró.
Ella sabe que en este momento es la voz de muchos que quieren decir lo mismo pero, que por diferentes razones, no lo hacen. Así se lo han hecho saber este 17 de enero, cuando se conoció su salida del Comité.
Corrales no es la única persona en dejar este grupo de trabajo. También lo hizo la pediatra e inmunóloga Olga Arguedas Arguedas, directora del Hospital Nacional de Niños (HNN), quien fue parte muy activa del Comité.
Los tres eventos
Corrales, quien tiene un posdoctorado en Microbiología, indicó que durante meses dudó en si renunciaba o no. No obstante, hubo varios eventos que se convirtieron en una “acumulación de razones” para hacerlo. Hay tres que considera los más importantes:
1. Ataques a la Comisión Nacional de Vacunación y Epidemiología (CNVE). “Se comenzaron a hacer públicos sus nombres y a cuestionar sus decisiones, que estaban basadas en criterios técnicos y científicos, sin razón científica, más que todo por razones políticas o de ocurrencias”.
Aquel hecho, que se registró entre finales de julio e inicios de agosto, fue el primero que llevó a la científica a considerar la renuncia, porque sintió que también la atacarían a ella. “No le miento que he sido atacada por personas en redes sociales y he tenido un par de llamadas medio ‘peligrosas’; por eso también me abstraje mucho del ojo público”.
Cuando se dieron estos problemas, el Comité pidió una carta donde se le ratificara y esta fue escrita y firmada por la jerarca. No obstante, no se encontró más apoyo. Nunca se reunió con ellos. El director de Vigilancia de Salud, Rodrigo Marín Rodríguez, es quien ha ido a las reuniones y le ha llevado el mensaje a Chacón, pero no ha llegado a más.
“Al final, es la ministra quien toma las decisiones”, afirmó Corrales.
2. El “receso lluvioso”. La ministra de Salud decidió implementar un cese de lecciones en escuelas y colegios, del 11 al 14 de octubre de 2022, para contener la transmisión de virus respiratorios. A esta pausa se le llamó “receso lluvioso”. Sin embargo, la forma como fue implementado carecía de rigor científico, según el criterio del grupo experto.
“El Ministerio decidió tomar una decisión puntual cuando tenía que ser totalmente multifactorial para ayudar a disminuir los virus respiratorios en los niños”, dijo.
La viróloga manifestó que en ese momento se tensaron más las relaciones con los jerarcas de Salud.
“Se vio un corte, un antes y un después entre lo que nos oían en nuestras recomendaciones”, comentó.
3. Solicitud de prueba negativa a las personas provenientes de China, Hong Kong, Taiwán y Macao. Esta medida fue anunciada el pasado 5 de enero y se implementa desde el día 9. Al comunicarse la decisión, se informó que se basaron en un criterio técnico, pero de acuerdo con la científica, nunca se les consultó ni se les informó. Los miembros del Comité se enteraron por la prensa.
“Estoy dedicando tiempo a algo que no logra ningún objetivo”, reflexionó.
Decisiones sin sustento
En su carta de renuncia, Corrales adujo que la gestión de Chacón se había convertido en “objeto de informes engañosos e incorrectos”, que para ella ocurren desde el Ejecutivo, cuando se busca minimizar y “pintar una cara distinta” no solo sobre la covid-19, sino también sobre otras enfermedades, como la viruela del mono.
“Los mensajes confusos que han surgido hasta del Poder Ejecutivo y de los jerarcas, son los que hacen que estemos en el momento en el que estamos, donde están aumentando los casos, donde pueden surgir nuevas variantes, donde la gente no sabe o no entiende los efectos a largo plazo de la covid.
“Esos mensajes desde las jerarquías y desde el Ministerio, en contra de la evidencia científica, son parte del problema (...). Creo que la ministra y el Ejecutivo lo que quieren en este momento es una tendencia más populista en vez de una más basada en evidencia”, aseveró.
Corrales indicó que las decisiones sin sustento científico no solo se ven en el Ministerio de Salud, también en la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS). Una de ellas es el cierre de las áreas covid y no covid en los hospitales y el cierre del programa poscovid del Centro Nacional de Rehabilitación (Cenare).
“Ni a las comisiones de vigilancia epidemiológica de los hospitales ni al Comité se solicitó un criterio técnico”, aseguró.
La científica es enfática en que aunque la pandemia ya no presenta la emergencia que fue y que las restricciones como las vimos en 2020 e incluso 2021 ya no tienen caso, no hemos salido de la pandemia y todavía habrá gente que morirá, que tendrá efectos a largo plazo.
Por eso, insistió en que todavía son necesarias la vacunación y el uso de mascarillas en lugares cerrados y poco ventilados, así como no ir a trabajar o estudiar si se está con síntomas. No obstante, si el mensaje es “ya salimos de esto”, el país será el más afectado.
¿Quién es Eugenia Corrales Aguilar?
El nombre de Eugenia Corrales Aguilar se ha escuchado como referente de las informaciones del SARS-CoV-2, virus causante de la covid-19. Sin embargo, desde mucho antes es una de las científicas más destacadas en el campo de la Virología.
Corrales es coordinadora de la Sección de Virología Médica del Centro de Investigación en Enfermedades Tropicales de la Universidad de Costa Rica (CIET-UCR).
Para llegar ahí, primero estudió Microbiología en la UCR, donde ingresó en 1996. Posteriormente, su amor por la Virología le permitió obtener una beca para realizar un doctorado en Alemania y un posdoctorado en España; de ambos se graduó con honores.
En 2014, ganó el Premio Nacional de Ciencia y Tecnología Clodomiro Picado Twight.
Sus estudios no solo la han llevado a seguir de cerca al virus causante de la covid-19. Dentro de sus investigaciones destacan los virus causantes de enfermedades vectoriales, como dengue y zika.
Ahora, se dedicará de lleno a sus trabajos de investigación como muestreos en personas y mosquitos para analizar dengue o zika. Además, tiene proyectos de investigación de covid que estaban de lado, como análisis genéticos del virus causante de la enfermedad, estudios serológicos y otros para caracterizarlo.
También seguirá con la docencia y retomará tesis con estudiantes de grado y posgrado. “Son cosas prácticas que tendrán un fin y objetivo y no serán un ente técnico donde no se oye la asesoría que uno da”, concluyó.
¿Qué es el Comité Técnico en Infecciones Respiratorias?
Este comité no es nuevo. Se estableció con la alerta de posible pandemia por la influenza AH1N1 en 2009. Posteriormente, se han unido diferentes profesionales, según los patógenos que han circulado.
Con la llegada de la covid-19 se amplió el número de miembros y la diversidad de especialidades.
“Siempre hay representantes del Ministerio, entre esas la ministra, aunque nunca se reuniera con el comité desde que asumió”, expuso.
Participan profesionales en Infectología pediátrica y de adultos, epidemiólogos, salubristas públicos y funcionarios del Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud (Inciensa). Corrales fungía como especialista en Virología, pero también representaba a la UCR.
Desde inicios de 2020, se reúnen al menos una vez por semana. Al inicio de la pandemia estas reuniones eran casi de todos los días, pues de este grupo emanaban los diferentes lineamientos para toma de pruebas, aislamiento de casos y contactos, indicaciones médicas, entre otros aspectos.
Para entonces, incluso se les sugería la incorporación de especialistas en otros campos que podían aportar conocimientos.
Esta no es la primera renuncia a este Comité. En octubre pasado la pediatra inmunóloga Olga Arguedas Arguedas, directora del Hospital Nacional de Niños, también se apartó del puesto. Su caso fue por una razón diferente.
“El 14 de octubre dirigí formalmente mi nota a la señora ministra de Salud. La razón fundamental es que ya no tenía tiempo. En ese grupo (el comité) hay que estudiar muchísimo y estaba yo en pleno pico de infecciones respiratorias y la actividad hospitalaria era muy demandante”, justificó Arguedas.