El Ministerio de Salud se mantiene vigilante frente al posible ingreso del virus Oropouche, una enfermedad transmitida por zancudos al igual que el dengue, con el cual comparte algunos síntomas, aunque con eventuales riesgos adicionales.
Esta enfermedad está presente en países latinoamericanos, como Brasil, Colombia, Cuba y Perú. Desde el pasado 17 de julio, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) giró una alerta epidemiológica motivada por el aumento de afectados. Costa Rica por el momento no reporta casos, pero ante el aumento en otros países la vigilancia se hace necesaria.
“Estas circunstancias requieren una respuesta coordinada y oportuna por parte de los países afectados para intensificar la vigilancia epidemiológica, mejorar las capacidades de diagnóstico y reforzar las medidas de control vectorial. En el Ministerio de Salud de Costa Rica, se han iniciado preparativos ante la posibilidad de introducción del virus en el país“, destacó Salud este 12 de agosto en su Boletín Epidemiológico.
Esto no quiere decir que el virus vaya a ingresar a Costa Rica, pero conviene estar preparados si así ocurre. Este tipo de medidas de vigilancia preventiva se dan para actuar si la situación evoluciona.
Por ejemplo, en setiembre de 2023, Salud habló de vigilancia al virus Nipah, mientras que en 2014, se activó un protocolo ante el eventual ingreso del ébola, aunque al final ninguna de estas enfermedades llegó.
En esta ocasión, dada la cercanía de Costa Rica con los países que registran Oropouche, las probabilidades de que se den casos son más altas.
¿Qué es el Oropouche?
El virus Oropouche (OROV, por el acrónimo con el que se identifica en inglés) es el agente causante de la fiebre Oropouche. Recibe este nombre porque se describió por primera vez en Vega de Oropouche, Trinidad y Tobago, en 1955.
Es una enfermedad zoonótica. Es decir, primero infectó a animales y luego, mutaciones del virus hacen que se adapte a la infección en humanos.
También es una enfermedad vectorial, es decir, no se transmite de persona a persona y hace falta un vector, un insecto u otro animal, para ser transmitido.
En este caso, se transmite principalmente a través de la picadura del mosquito Culicoides paraensis (también conocido como jején, purruja o mosquito de la arena). La infección también puede darse por el mosquito Culex quinquefasciatus, "que está ampliamente distribuido en Costa Rica”, reconoció Salud.
Si un zancudo pica a una persona enferma, se hará portador y podrá infectar a las personas que pique a continuación.
La enfermedad tiene un periodo de incubación promedio de cuatro a ocho días (con un rango posible de tres a 12 días). Es decir, entre el momento en el que un zancudo con Oropouche pique a una persona, transcurrirán esos días para el inicio de síntomas.
¿Cuáles son los síntomas del Oropouche?
Una de las complejidades de esta enfermedad es que tiene síntomas similares a los del dengue: fiebre alta, escalofríos, cefalea (dolor de cabeza), mialgias (dolores musculares) y artralgias (dolor en las articulaciones). En ocasiones, también hay náuseas y vómitos.
“Esto hace esencial una diferenciación diagnóstica precisa, la cual se confirma mediante pruebas de laboratorio”, aseveró el boletín.
Estas manifestaciones comienzan de forma súbita y duran entre cinco y siete días. En casos raros se produce meningitis.
Actualmente, no hay ni vacunas ni medicamentos antivirales específicos para prevenir o tratar la infección por OROV. Entonces el tratamiento se centra en aliviar el dolor, rehidratar al paciente y controlar cualquier síntoma.
¿Cómo ha afectado el Oropouche a otros países?
En las primeras 29 semanas del año (que terminaron el 20 de julio) se habían notificado 8.078 casos y dos fallecimientos de fiebre de Oropouche en América.
La incidencia está en cinco países: Bolivia (356 casos), Brasil (7.284 casos y dos defunciones), Colombia (74 casos), Cuba (74 casos) y Perú (290 casos).
Además, se han visto casos en Europa de turistas que estuvieron en uno de los países con la enfermedad, principalmente Cuba y Brasil. El Centro Europeo para el Control y la Prevención de Enfermedades (ECDC) contabiliza 19 casos: 12 en España, cinco en Italia y 2 en Alemania. La institución declaró que quienes consideren viajar a países donde esté la enfermedad se enfrentan con un riesgo moderado y les recomiendan usar repelente.
Preocupación por transmisión de Oropouche de madre a bebé
Aunque el virus se conoce desde 1955, ahora se une la preocupación de posibles casos de transmisión vertical del virus (de la madre a su bebé en el vientre) en Brasil.
Hasta el 25 de julio pasado, se habían registrado una muerte fetal, un aborto y cuatro casos de recién nacidos con microcefalia en tres estados diferentes de Brasil.
“Estos casos están bajo investigación para determinar la posible relación entre el virus y estas graves complicaciones perinatales”, indicó Salud.
La OPS giró una directriz el pasado 17 de julio. En dicho documento, se repasaba lo visto en algunos de los incidentes en Brasil.
En un estudio retrospectivo realizado en esa nación, fue posible detectar la presencia de anticuerpos contra OROV en suero y líquido cerebrorraquídeo en cuatro neonatos. Estos neonatos presentaron microcefalia, sin embargo, no fue posible establecer una relación causal entre la infección por OROV y estas malformaciones neurológicas.
Además, se identificó material genético de OROV en sangre del cordón umbilical, placenta y diversos órganos de una muerte fetal ocurrida con 30 semanas de gestación, lo cual sustenta una posible transmisión vertical.
“Según informó la Secretaría de Vigilancia en Salud y Ambiente del Ministerio de Salud Pública de Brasil, se están realizando análisis conjuntos de laboratorio, epidemiología y clínica para poder concluir la clasificación final de este caso en particular”, cita la OPS.
El documento añade que las evidencias mencionadas enfatizan la necesidad de fortalecer la vigilancia del OROV en casos en los que se sospeche la transmisión vertical.
¿Qué podemos hacer nosotros?
Como la enfermedad no ha ingresado a Costa Rica, por ahora lo necesario es mantenerse vigilante ante las informaciones de las autoridades de salud.
Medidas para implementar una reducción de las comunidades de mosquitos, como las que se realizan para eliminar los criaderos del dengue, también son de ayuda contra esta enfermedad.