Los casos de virus respiratorios en la población infantil mantienen un crecimiento tan fuerte que el Hospital Nacional de Niños (HNN) ya registra una ocupación del 145% en las áreas destinadas a la atención de este tipo de enfermedades.
Cada año, cuando se presenta el pico de males respiratorios en el país, el HNN opta por una reconversión de camas que implica “pasar” espacios destinados a otros padecimientos para atender a pacientes respiratorios.
Sin embargo, este año registra picos que son mayores que muchos de los reportados anteriormente y la previsión de las autoridades de salud es que la situación podría mantenerse de 12 a 16 semanas más.
Este 12 de setiembre, el centro pediátrico contabilizó 98 pacientes respiratorios hospitalizados y 11 en el servicio de Emergencias. De estos últimos, ocho requieren ventilación asistida, pues no pueden respirar por sí solos.
De acuerdo con un comunicado del Ministerio de Salud, el incremento de estos padecimientos se observa en todos los servicios de pediatría de la red hospitalaria del país.
Por ejemplo, el pasado 9 de setiembre, había 80 niños con males respiratorios en el Hospital Max Peralta, en Cartago; 60 en el Enrique Baltodano, de Liberia: y 40 en el Monseñor Sanabria, de Puntarenas.
Lo anterior se debe a la acción de tres virus que afectan principalmente a la población pediátrica: el sincitial respiratorio, el metapneumovirus y el rinovirus. A esto se le debe añadir que ni la influenza ni la covid-19 han desaparecido del todo.
¿Qué hacer ante el aumento de virus respiratorios?
Estas son las recomendaciones del Ministerio de Salud:
- Complete los esquemas de vacunación según la edad de los niños.
- Lave sus manos frecuentemente, especialmente después de tener contacto con secreciones respiratorias, objetos o materiales contaminados, luego de ir al baño y antes de ingerir alimentos.
- Utilice pañuelos desechables al toser o estornudar, ponga en práctica la técnica y cúbrase con el antebrazo al estornudar o toser.
- Evite asistir a actividades masivas con niños menores de cinco años.
- Distancie a los niños de personas enfermas para evitar que se infecten.
- Busque atención médica si es necesario.
- Evite medicar a los niños sin antes haber realizado una consulta médica.
- Prefiera actividades al aire libre y en espacios ventilados.
- Evite que niños con síntomas respiratorios, diarreas y vómitos asistan o permanezcan en centros educativos.
- Asista al nivel de atención primaria (Ebáis) correspondiente. En caso de que se requiera una atención especializada, allí harán la respectiva referencia al nivel de atención secundario (clínica) o terciario (hospital), si así corresponde.
También es necesario estar alerta a estas posibles señales de alarma:
- Fiebre persistente mayor a 39 °C.
- Rechazo a la lactancia en los menores de seis meses.
- Llanto e irritabilidad sin una razón aparente.
- Respiración muy rápida o falta de respiración.