Una demostración impresionante de la cadena alimentaria marina ocurrió en la playa de la desembocadura del río Nyara, en Eastern Cape, Sudáfrica. El 29 de mayo, un gran tiburón blanco de 4,5 metros de largo fue encontrado en la arena, mostrando claras señales de haber sido atacado y muerto por un depredador mayor.
Dentro del tiburón, los investigadores encontraron los restos de un delfín de 1,8 metros, cortado en cuatro partes. El delfín fue devorado poco antes de que el tiburón fuera abatido y arrastrado a la playa.
“La necropsia reveló que el hígado del tiburón estaba ausente, dejando solo un pequeño trozo de tejido”, informó la bióloga marina Alison Towner, según reportó el NY Post. La causa de la muerte del gran depredador quedó clara al observar las marcas de dientes en el cuerpo del tiburón: una orca era la responsable del ataque.
El examen “confirmó por primera vez la depredación de una orca sobre un tiburón blanco en Eastern Cape”, afirmó Towner. Aunque este fue el primer caso registrado en la zona, es el decimocuarto caso confirmado de orcas depredando tiburones blancos en Sudáfrica en los últimos nueve años, según la científica. Las orcas suelen cazarlos para consumir sus hígados, y estos ataques podrían estar relacionados con la disminución de avistamientos de tiburones blancos en la región.
Antes de que los científicos encontraran el tiburón, cazadores de trofeos retiraron sus dientes, utilizados comúnmente como adornos. Esta acción impidió que el animal fuera donado a un museo en East London, Sudáfrica.
Después de que los investigadores tomaron muestras de tejido y músculo para estudios en curso sobre la genética y dieta del tiburón blanco, los restos del animal fueron enterrados en un lugar remoto.
*La redacción de este contenido fue asistida con inteligencia artificial.