Un trasplante masivo de corales permitió restaurar más de 6.200 metros cuadrados de arrecife degradado en tres países del área, incluyendo Costa Rica, que recibió nuevas colonias en Playa Blanca y Sámara en Guanacaste; así como en Punta Leona y Golfo Dulce de Puntarenas.
Este fue parte del resultado de la iniciativa Coralmania cuya meta es restaurar y proteger la biodiversidad marina gracias al trabajo de organizaciones, fundaciones, empresas turísticas y entidades estatales.
Otros países beneficiados con corales fueron República Dominicana y Honduras durante las incursiones al mar realizadas entre noviembre y diciembre que abarcaron 11 puntos entre los tres países.
En el caso de Costa Rica, este año se realizó el trasplante de la especie de coral Pocillopora spp. gracias a la participación de 90 buzos voluntarios, los cuales lograron transplantar más de 900 colonias de dicha especie considerada uno de los corales de más rápido crecimiento y que, por su forma ramificada, sirve de hogar para muchas especies de crustáceos.
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Los arrecifes de coral figuran entre los ecosistemas más diversos y biológicamente más complejos del mundo. Un cuarto de toda la vida marina depende de ellos para alimentarse, o bien, como refugio. Como animales marinos coloniales, los corales viven en simbiosis con algas que cubren su esqueleto de carbonato de calcio. Asemejan a los bosques tropicales en tierra por su diversidad biológica y fragilidad.
Como aquellos, también sufren las desgracias de la acción humana por agroquímicos o sedimentos vertidos en los ríos que desembocan en las costas, embarcaciones que los golpean o aguas más calientes por el cambio climático. Todo esto degrada las colonias coralinas.
Coralmanía, un programa creado desde el 2016, busca mitigar esa degradación de corales como parte de la cooperación entre Costa Rica, República Dominicana, Honduras y Alemania que promueven la conservación y restauración de arrecifes coralinos en los tres países, mediante la transferencia, intercambio y consolidación de experiencias y herramientas.
Esta iniciativa se realiza cada año desde entonces en conjunto con el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac) y el Ministerio de Ambiente y Energía (Minae), con el apoyo técnico de la GIZ. Este año, otras organizaciones participantes incluyeron a Raising Coral Costa Rica, la Universidad de Costa Rica, la Asociación Proyecto Corales Playa Sámara, el Instituto Nacional de Aprendizaje, Scuba Caribe y MareBlue.