Los casos positivos de gusano barrenador se duplicaron en el último mes debido a la presencia de una cepa de mosca más agresiva, según confirmaron las autoridades de salud animal. De acuerdo con los registros del Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa), hasta el lunes 17 de junio totalizaban 2.268 casos, un incremento del 112% respecto a los 1.068 contabilizados a inicios de mayo.
“Tenemos una fase de expansión de los brotes porque estamos frente a una mosca muchísimo más agresiva y resistente a tratamientos”, indicó a La Nación Alexis Sandí, jefe del Departamento de Epidemiología del Senasa.
La enfermedad es causada por la mosca Cochliomyia hominivorax, que deposita larvas en heridas expuestas, y afecta tanto a animales de sangre caliente como a seres humanos. Costa Rica había erradicado esta plaga en el año 2000, por lo que su reaparición, en julio de 2023, fue considerada una “reintroducción”.
Sandí dijo que se ha comprobado que esta vez el insecto se desplaza más rápido, lo que aceleró su presencia en todo el país en comparación con las moscas que fueron erradicadas hace más de dos décadas. Durante la última semana, el Senasa reportó 254 nuevos casos en 40 cantones del país. La mayoría de los incidentes se registraron en Buenos Aires, Puriscal, Pococí, San Carlos, Turrubares, Sarapiquí, Guácimo, Puntarenas, Talamanca y Tilarán, todos con más de 10 ocurrencias.
El ganado bovino es el más perjudicado, con el 77,2% de los casos registrados, seguido de caninos (14,2%), equinos (2,9%) y porcinos (2,7%). Además, hay casos en ganado ovino, felinos, caprinos y aves. La incidencia en humanos representa el 0,2%. El Ministerio de Salud ya confirmó seis casos de personas afectadas.
Las autoridades declararon en febrero pasado la emergencia sanitaria en el territorio nacional para prevenir, controlar y erradicar la propagación de la enfermedad. Entre las medidas adoptadas está la regulación del transporte de animales, permitido solo entre las 6:00 a. m. y las 6:00 p. m., y la instalación de puestos de control para verificar la salud de los animales transportados. Sandí indicó que se ha contratado a más personal técnico y equipos para atender la emergencia, con el apoyo del gobierno de Estados Unidos.
Menos eficacia de las moscas estériles
Otra de las acciones que realizan las autoridades es la dispersión por vía aérea de 30 millones de moscas estériles semanales, el doble de hace un mes, con el objetivo de contrarrestar la diseminación de la enfermedad.
Este método, que fue efectivo durante la erradicación lograda en el año 2000, ahora enfrenta menos eficacia debido a que las moscas estériles compiten con las moscas de campo en el proceso de apareamiento con el insecto causante de la plaga.
La hembra de la mosca se aparea una sola vez en su vida, y este control biológico consiste en que produzca larvas estériles luego de su contacto con un macho que ha pasado por el proceso de esterilización en un laboratorio mediante irradiación. De esta manera, la población de insectos se va reduciendo. Sin embargo, este proceso está siendo menos eficaz, debido a que la mosca hembra elige su compañero y prefiere las moscas de campo.
“La mosca de campo está compitiendo muy eficientemente con la mosca que estamos liberando”, señaló Sandí. A la vez, consideró que la dispersión de moscas estériles sí está funcionando, pero no en la proporción esperada. Por esta razón, las autoridades sanitarias iniciaron el proceso para renovar genéticamente las cepas de moscas estériles, lo cual se realiza en un laboratorio de Panamá. “Pronto estaremos liberando una mosca mejor adaptada al medio ambiente”, apuntó.
El ingeniero agrónomo Rodolfo Wing Ching Jones, especialista en ganadería, destacó que el incremento de los casos también está vinculado a la afectación en animales silvestres y a que no se está brindando el seguimiento adecuado a los animales domésticos atacados. También mencionó la disponibilidad de productos de uso veterinario para controlar a la mosca en sus diferentes etapas de vida.
Luis Diego Obando, director ejecutivo de la Corporación Ganadera (Corfoga), hizo un llamado a los productores para que reporten los casos a las autoridades sanitarias y, en paralelo, hagan la revisión diaria de los hatos. En caso de encontrar un animal afectado, deben proceder de inmediato a la curación de las gusaneras debido a que es de transmisión agresiva, incluida hacia los humanos.
Senasa habilitó la línea de WhatsApp en el número 8966-6780 y el correo electrónico epidemiologia@senasa.go.cr para que se reporten los casos.