La mosca del establo, también conocida como mosca de la piña, está provocando afectaciones en la ganadería de la zona norte de Costa Rica. Esta situación motivó una reunión entre representantes de los ganaderos y el viceministro de Agricultura y Ganadería, Fernando Vargas, quien les informó sobre las acciones que se desarrollan para enfrentar el brote.
El ganadero Carlos González, explicó a La Nación que la plaga ya ha generado pérdidas de ganado. “A mí se me han muerto dos animales”, aseguró y explicó que también ha enfrentado abortos de vacas a causa de la incidencia del insecto. “Nadie se hace responsable de los acontecimientos”, señaló.
Yeimi Monge, ganadera de San Pedro en Cutris, San Carlos, dijo que las mayores afectaciones están en las zonas de Santa Fe, Aguas Zarcas, La Gloria y Pital, donde la densidad de moscas es más alta. En la reunión participaron ganaderos de estos lugares y representantes del cantón de Río Cuarto de Alajuela.
El encuentro se llevó a cabo este martes, en la sede del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) en el distrito de Pital, en el cantón de San Carlos, Alajuela.
La plaga es asociada a la producción de piña, debido a que los residuos del fruto en descomposición, es uno de los principales ambientes en que se desarrolla el insecto.
Preparan reformas
Al finalizar el encuentro, Vargas indicó que desde hace tres semanas vienen trabajando en conjunto con los productores para reducir los efectos de la plaga y acordó con los ganaderos reunirse cada 21 días para evaluar el proceso.
La plaga de la mosca del establo es un problema que sufre el país desde hace décadas, lo que ha provocado el reclamo constante de los ganaderos.
Anunció que la Presidencia de la República revisa una reforma al decreto que regula el tema de la mosca del establo (Stomoxys calcitrans) y además se inició el análisis de la Ley del Servicio Fitosanitario del Estado (SFE) y la del Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa) para hacerle frente a esta situación.
Vargas dijo que continuarán en la colocación de trampas verticales, nebulizaciones y ampliarán las visitas a las fincas para revisar el manejo de los rastrojos. “Estaremos llegando con mayor frecuencia a las empresas con el fin de evitar que tengamos la expansión de la plaga en las zonas piñeras”, detalló.
Al finalizar la reunión, González, ganadero de la zona de Santa Elena de Pital, dijo sentirse satisfecho del encuentro. “Nosotros no venimos a pelear que se quiten empresas piñeras como más de uno piensa, lo que queremos es defender nuestros derechos y que todos podamos trabajar unidos”.
Vargas agregó que ya en sectores de Cutris la plaga ha disminuido y esperan muy pronto tener solucionado el problema en las demás áreas afectadas.
Altas temperaturas inciden
El ingeniero agrónomo, Marcos Chaves, consultado por La Nación, indicó que este es un problema asociado principalmente a la zona norte del país y se relaciona con el mal manejo de residuos en el campo y a las altas temperaturas.
Explicó que la fermentación de las frutas, que se acelera con el calor, atrae a este insecto y es aquí donde se efectúa el ciclo de desarrollo de la mosca, al depositar los huevos.
“Es un problema endémico de la zona que tiene bastante tiempo sin una solución definitiva y eso viene asociado al mal manejo de los desechos de la piña, pero los productores vienen haciendo mayores esfuerzos junto con las autoridades, pero es un problema serio por ser una zona muy amplia”, indicó.
El especialista mencionó que la mosca provoca severas afectaciones al ganado. “Lo que hace es picar al animal, lo debilita porque gasta mucha energía contrarrestando los ataques del insecto, eso lo lleva a perder peso y valor comercial e incluso le puede causar la muerte”, explicó Chaves.
Stephanie Rodríguez, ingeniera agrónoma de la Cámara Nacional de Productores y Exportadores de Piña (Canapep), señaló que el desarrollo de este insecto se puede dar en otros tipos de rastrojos, como en los cítricos y no es exclusivo de la piña.
“El piñero no dice: voy a producir moscas, inciden otros factores, por ejemplo el clima en este momento”, agregó. Junto con el Senasa realizaron este miércoles inspecciones en fincas piñeras y ganaderas en la zona de San Carlos.
Rodríguez agregó que debido al incremento en los precios de los insumos, hay casos de fincas de productores pequeños de piña que están sin atención y son vehículo para la proliferación de plagas.
Para Luis Obando, director ejecutivo de la Corporación Ganadera (Corfoga), en este momento la situación en la zona norte es grave pero dijo sentirse satisfecho que las autoridades estén tomando el control junto con los productores para solucionarla.
“La solución radica en los procedimientos y protocolos de inspección de fincas y demás, porque la actividad piñera se da en otras zonas del país y no hay afectaciones (por la plaga), lo que significa que hay otros lugares donde la producción de la fruta no causa afectación”, concluyó.