El Gobierno presentó, la mañana de este miércoles 22 de enero, el Plan Nacional de Aguacate, un documento en el que se incorporan una serie de propuestas y políticas públicas orientadas a más que duplicar el área sembrada de la fruta, en Costa Rica, para 2020.
Por medio de facilidades de financiamiento para los productores, apoyo técnico y un esquema de organización para este sector agrícola, la apuesta del Ejecutivo es pasar de 2.000 hectáreas de aguacate sembrado en la actualidad, a poco más de 4.500 hectáreas para el final de la presenta administración (un aumento de 125%), que será en mayo del 2022.
Renato Alvarado, ministro de Agricultura, explicó, en entrevista con La Nación, que la propuesta busca centrarse en algunos pilares para apoyar una producción más organizada, robusta y creciente de la fruta con el objetivo de cubrir la demanda nacional en su totalidad, que actualmente es de 13.000 toneladas por año.
El jerarca puntualizó que el primer paso para conseguir este objetivo es ofrecer recursos económicos para financiar la producción de aguacate de altura y de bajura, por esa razón, el Banco Nacional de Costa Rica (BNCR) dispondrá de ¢5.000 millones para ofrecer créditos a los agricultores. También se utilizarán los préstamos del Sistema de Banca para el Desarrollo (SBD).
“Pondremos a disposición transferencia de tecnología para los productores a través del Instituto de Desarrollo Rural (Inder). El Instituto Nacional de Aprendizaje (INA) ayudará a mejorar la información y la educación de los agricultores en el uso de nuevas tecnologías, con ellos podemos traer expertos al país para dar capacitación técnica”, agregó Alvarado.
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El plan pone a disposición de los 900 productores de aguacate en el país las diferentes dependencias del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), con el objetivo de ofrecer aportes para su actividad.
Para implementar esta iniciativa, el Gobierno propuso cinco ejes estratégicos que son: el fortalecimiento organizacional de los productores aguacateros; la investigacióón, innovación, transferencia y asistencia técnica, la comercialización y agregación de valor, las buenas prácticas en el manejo de la agrocadena de la fruta y el financiamiento e inversión.
Uno de los objetivos de la iniciativa es mejorar la forma en que están organizadas cerca del 60% de las personas que se dedican a la actividad de producción de aguacate en Costa Rica, con el fin de crear cadenas de valor para mejorar la calidad de la fruta, promover el uso de bioinsumos y alcanzar un producto más inocuo.
En Costa Rica se cultiva aguacate de altura en la zona de Los Santos y de bajura principalmente en el Pacífico central, en regiones como, por ejemplo, Orotina y Atenas.
De acuerdo con Alvarado, la meta es ampliar la cantidad de productores para que sean más de 900 en todo el país. “Se pretende explorar la producción de altura en las zonas altas de Pérez Zeledón (San José) y en otras regiones de la bajura”, apuntó.
Más aguacate Hass
Una de las variedades de aguacate más demandado por los consumidores en el país es el Hass, que tradicionalmente se importó desde México hasta junio del 2015, cuando las autoridades del Servicio Fitosanitario del Estado (SFE) impusieron una restricción como “medida de emergencia” para traer este producto de naciones en las que se reportó la presencia de la avocado sunblotch viroid, un tipo de mancha de sol.
Esta medida prohibió la importación de aguacate Hass de países como México, Australia, España, Ghana, Guatemala, Israel, Sudáfrica, Venezuela y Estados Unidos. Con la restricción se puso fin al dominio mexicano en el mercado local de aguacates.
La última importación de producto mexicano a Costa Rica fue en junio del 2015 por 111 toneladas, mientras que antes de la medida se registraban cerca de 1.000 toneladas por mes, según datos de la Promotora del Comercio Exterior (Procomer).
En agosto del 2018, el país cambió su política para controlar el ingreso de este tipo de fruta procedente de países con mancha de sol, pero se detuvo la importación de aguacate procedente de México.
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El veto abrió la puerta para que mercados de países como Chile, Nicaragua, República Dominicana, Colombia, Honduras, Guatemala, Perú y Estados Unidos se convirtieran en los principales abastecedores ante la demanda nacional.
Nicaragua, Chile y Perú generaron más del 90% de las importaciones entre 2016, 2017 y los primeros meses del 2018.
El Ministro de Agricultura aseguró que una de las propuestas es que productores actuales de aguacate y otros agricultores que se dedican a diferentes tipos de cultivos, pero que quieran explorar esta fruta, puedan volcarse al Hass que tiene alta demanda en el mercado local.
Mientras tanto, el conflicto entre Costa Rica y México por la restricción al aguacate se dirime en un proceso internacional en el seno de la Organización Mundial del Comercio (OMC). El Ministerio de Comercio Exterior (Comex) espera que el tema se resuelva a finales de este año.