El Servicio Fitosanitario del Estado (SFE), del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), alertó sobre la presencia de la especie invasora conocida como “hormiga loca”, en diferentes regiones del país. Esta plaga se registró, por primera vez en Costa Rica, en el 2016.
Se trata de una hormiga pequeña, rojiza, similar a una especie común en Costa Rica, con la diferencia de que esta es nativa del Amazonia de Brasil y es capaz de afectar cultivos por la simbiosis con otros organismos plaga, así como atacar animales domésticos y silvestres.
LEA MÁS: Caracol gigante africano se mantiene contenido en distrito de Guanacaste
En un comunicado de prensa, el Servicio Fitosanitario explicó que esta especie (Nylanderia fulva) tiene gran capacidad para diseminarse y desplazarse, por lo que se ha trasladado a San Ramón, Palmares, Naranjo, Sarchí, Atenas, Grecia, Poás, Alajuela y parte de Heredia, en la región Occidental.
Además de Puntarenas, Esparza, Monte de Oro y San Mateo, en el Pacífico Central, así como en La abundancia de Ciudad Quesada, El Tanque y Chachagua, de la región Huetar Norte. Actualmente, esta especie invasora se ubicó en Cañas, en Guanacaste.
Según una investigación de la Liga Agrícola Industrial de la Caña de Azúcar (Laica), fue a mediados del 2016 que dieron con la primera aparición de esta especie de hormiga, aunque no hay evidencia de cómo fue el ingreso. La hormiga tenía un comportamiento similar a una especie muy común en el país, pero con la diferencia de que estaba estableciéndose en plantaciones de caña de azúcar, en Grecia de Alajuela.
En el informe, Laica destacó que su nombre común responde a que su desplazamiento es muy rápido y sin rumbo definido. Además, se alimentan de sustancias líquidas y sólidas, como jugos de fruta, néctar de flores, así como de otros insectos y animales.
De acuerdo con el Servicio Fitosanitario, la “hormiga loca” no ataca directamente a las plantas, pero es capaz de trasladar otros organismos que pueden afectar los cultivos, como pulgones, ácaros, cochinillas y escamas. Al ser una especie tan invasiva, puede desplazarse a otras hormigas y colonizar rápidamente un territorio.
Esta hormiga puede afectar especies como aves y ganado, ya que son atraídas por las secreciones corporales de esos animales, a los que les puede causar ceguera o la muerte. Por esa razón, el Servicio Fitosanitario también trabaja de forma coordinada con el Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa).
La “hormiga loca” también puede atacar especies silvestres como iguanas, garrobos, aves, armadillos, entre otros, afectando la biodiversidad, e incluso puede establecerse en las casas de habitación y otras infraestructuras, detalló la institución, en el comunicado.
LEA MÁS: Roya del café reaparece en niveles altos y pone en alerta a la cadena de producción
Según un estudio de la Universidad de Misisipi, de los Estados Unidos, una vez establecida, esta especie es muy difícil de controlar, debido a la facilidad con la que alcanzan una densidad de población alta. El informe del centro académico recomienda mantener los sitios libres de escombros como hojas o madera, pues anidan en ese tipo de ambientes.
“Debido a las poblaciones excesivamente grandes, esta especie es difícil, si no imposible, de controlar por parte de un propietario y, por lo general, requiere visitas regulares de exterminadores profesionales. Incluso entonces, es difícil mantener a raya a esta plaga cuando hay grandes poblaciones presentes”, indicó la investigación.
En Estados Unidos, su detección inicial fue en Texas, en el 2002, y desde entonces ha causado graves daños económicos y ecológicos en el sur de ese estado. Además, se ha ido extendiendo por el sur de ese país, según el estudio de la universidad.
Las autoridades costarricenses recomiendan la aplicación de cebos, siguiendo las instrucciones técnicas del MAG, así como asegurarse de controlar los productos antes de despacharlos, principalmente de material vegetativo y propagativo como viveros, pastos para siembra, almácigos de café, semilla de caña de azúcar y sitios de producción de pacas para alimento.
La entidad también instó a revisar el tren de rodaje de los camiones que llegan a recoger los productos en las áreas con presencia de la plaga, para evitar el traslado de la misma a otras partes del país. En su informe, Laica también recomendó un monitoreo de las poblaciones de la hormiga, para identificar cuando la densidad sea muy alta y así poder aplicar cebos.