Los supermercados europeos solicitan una rebaja en el precio de compra del banano procedente de Latinoamérica. De hacerse efectiva la propuesta, habría afectaciones económicas directas en la actividad bananera de Costa Rica, que involucra a 150.000 familias y genera alrededor de $1.000 millones anuales en exportaciones, según aseguró un representante del sector.
La Unión Europea (UE) es el principal destino de la fruta costarricense, en donde se colocó el 48% del volumen en el 2022. Las exportaciones de banano generaron $998 millones el año pasado, según cifras preliminares de la Promotora de Comercio Exterior (Procomer), que incluye información restaurada del segundo trimestre tras el ciberataque que afectó al Ministerio de Hacienda. La Corporación Bananera Nacional (Corbana) coloca las ventas al exterior en $1.100 millones.
Los datos de Procomer ubican al banano como el segundo producto agrícola exportado en el 2022, después de la piña, aunque muy cerca. Sin embargo, con datos a octubre del 2023, se ubicó en el primer puesto, con un acumulado de $982,2 millones.
Corbana informó de que el sitio Reefer Trends, especializado en el comercio internacional de frutas, anunció el 8 de diciembre pasado sobre la solicitud de los supermercados europeos de rebajar 1,30 euros ($1,43) en el precio de la caja de banano, por lo que pasaría de 16,30 euros ($17.91) a 15 euros ($16,48).
Jorge Sauma, gerente general de Corbana, indicó a La Nación que la propuesta de los supermercados europeos amenaza la actividad bananera, ya que tienen que enfrentar los costos propios de la actividad, que se han visto incrementados por la actualización de certificaciones, el ajuste del salario del 7% a los trabajadores realizado a inicios de año y la depreciación del colón frente al dólar.
La mayor producción de banano en Costa Rica se desarrolla en la región Huetar Caribe, principalmente en la provincia de Limón. Sauma estima que la actividad involucra a 150.000 familias a nivel nacional, siendo el principal generador de fuentes de trabajo en zonas marginales, según indicó.
Sauma explicó que en la cadena de comercialización exportable de la fruta, que involucra a productores, exportadores, maduradores y comercializadores, los supermercados son los que tienen el mayor margen de ganancias. Además, el banano es utilizado por estos comercios como referencia de precios para el resto de las frutas, ya que es la única que se abastece durante todo el año, a diferencia de las demás, que son estacionales.
Para el representante de Corbana, ubicar al banano como referencia de precios es más bien un elemento distorsionador, ya que durante la emergencia provocada por la pandemia de la covid-19 fue el producto que creció menos y ahora enfrenta otros riesgos, como la instalación del fenómeno climático El Niño y que está, además, relacionado directamente con la situación logística del Canal de Panamá.
Por lo anterior, consideró que “no es consecuente” que los supermercados europeos quieran bajar el precio de compra en vez de aumentarlo.
Sauma señaló que, aunque por ahora es una solicitud, la propuesta no debería proceder debido a que ningún país de Latinoamérica está en condiciones para enfrentar una rebaja de precios. En la región, otros productores de banano son Ecuador, Brasil, Guatemala, Colombia y México.
El jerarca del Ministerio de Comercio Exterior (Comex), Manuel Tovar, indicó que en coordinación con Corbana trabajan en los temas de política pública implementadas por los países compradores de fruta y que afectan al sector bananero nacional. Sin embargo, señaló que la definición de los precios de transacción es un tema eminentemente privado, asegurando que el margen de acción de la entidad es limitada.
Las proyecciones de Corbana para el cierre de 2023 apuntan a la exportación de 124 millones de cajas, generando más de $1.100 millones, dato similar a 2022. Entre los principales destinos en la UE se encuentran Holanda, España, Italia y Bélgica.