Los sectores productivos de piña y raíces y tubérculos serán los más impactados por el endurecimiento de los controles sanitarios contra el coronavirus en fincas y plantas empacadoras de la zona norte.
La yuca, el principal producto entre las raíces y tubérculos, está en plena etapa de recolección de la cosecha.
De esa raíz hay sembradas 10.290 hectáreas en la región Huetar Norte, con lo cual se convierte en el tercer sector de relevancia en la zona, detrás de la ganadería y la piña, según datos de un documento de la dirección regional del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).
La piña es el segundo producto en importancia por área sembrada en aquella zona. El reporte del MAG indica que el total es de 17.862 hectáreas.
Esta fruta se encuentra en producción permanente durante todo el año, por lo cual las plantas empacadoras y fincas siempre tienen trabajadores.
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La mayor cantidad de área en ese territorio (244.398 hectáreas) se dedica a la ganadería, tanto de leche como de carne y de doble propósito.
Dicho territorio, limítrofe con Nicaragua, también presenta como cultivos importantes la naranja, con 9.635 hectáreas sembradas y la caña de azúcar, con 7.936 hectáreas. Empero, la cosecha de estos se realiza entre diciembre y marzo, por lo cual en este momento no atraen grandes cantidades de mano de obra.
Este 10 de junio, los ministerios de Agricultura y Ganadería (MAG) y de Salud, anunciaron un endurecimiento de los operativos conjuntos con la Dirección General de Migración y Extranjería, la Comisión Nacional de Emergencias (CNE) y otras entidades, en aquella región.
El objetivo es contener una eventual propagación del coronavirus, luego de un foco encontrado en las plantas Bajo Cero y B&C Exportadores, en las cercanías de Los Ángeles de La Fortuna, San Carlos.
Los ministros señalaron que hay 49 casos positivos, desde el 1.° de abril, relacionados con esas empacadoras de tubérculos y fincas aledañas a la zona.
El ministro de Salud, Daniel Salas, advirtió de nuevo a los empresarios en el sentido de que se requiere su ayuda para contener una eventual expansión de la covid-19. “El empresario que no se alinee, que no pueda cumplir con las medidas, no podrá operar, porque estamos defendiendo la salud de la población”, indicó el jerarca.
Luego del anuncio de las medidas en la habitual conferencia de prensa de informe del estado sanitario por la covid-19, este miércoles 10 de junio, La Nación le consultó al jerarca del MAG, Renato Alvarado, acerca de la cantidad de plantas industriales a inspeccionar y la cantidad de trabajadores que laboran an agricultura en la región.
Por medio de su asesoría de prensa, Alvarado explicó que información tan detallada y específica aún no la tienen.
Mayores controles
El presidente de la Cámara Nacional de Agricultura y Agroindustria (CNAA), Juan Rafael Lizano, calificó como una injusticia que se culpe a los empresarios agrícolas por la situación con el coronavirus en la zona norte.
“Hay que preguntarse cuál ha sido la labor de la Policía y (el Ministerio de) Salud; no pararon nada y cómo va a ser posible que digan que nosotros somos los culpables mientras dejan entrar a los extranjeros, quienes llegan a las cuarterías donde viven los trabajadores de las fincas y plantas empacadoras”, enfatizó el dirigente agrícola.
En esas cuarterías, señaló, es donde se produce el contagio de los trabajadores de las fincas y empacadoras.
Abel Chaves, presidente de la Cámara Nacional de Productores y Exportadores de Piña (Canapep), aseguró que ese gremio viene aplicando en fincas y plantas empacadoras de la fruta todo los protocolos necesarios, adecuados y puestos en vigencia por las autoridades de salud.
Recordó que hasta ahora, en toda la gran extensión piñera y en las empacadoras afiliadas a Canapep, no se ha detectado ningún caso positivo con el coronavirus.
Calculó que en la zona norte hay entre 25 y 30 plantas empacadoras de piña y que la actividad emplea a alrededor de 15.000 personas directamente.
La CNAA expresó, en un comunicado, que las 26 cámaras afiliadas están trabajando junto con el MAG en la elaboración y aprobación de los correspondientes protocolos sanitarios, para garantizar el abastecimiento de los alimentos que nutren a los costarricenses, así como para mantener las exportaciones de productos.
Lizano aseguró que las medidas de higiene, como lavado regular de manos, toma de temperatura, disponibilidad de alcohol en gel, uso de equipo protector y otros se están aplicando en las empresas del sector.