El Senara aún no consigue los recursos para terminar los conductos secundarios que llevarán el riego a fincas de algunos sectores de Cañas y Abangares desde el denominado canal del sur, seis meses después de inaugurado.
Así lo reconocieron el ministro de Agricultura y Ganadería (MAG), Luis Felipe Arauz, y la gerenta actual del Servicio Nacional de Aguas Subterráneas, Riego y Avenamiento (Senara), Patricia Quirós, luego de denuncias de posibles usuarios del sistema de riego, ubicado en Guanacaste, donde la irrigación en fundamental para la producción.
Los problemas con esta obra surgieron en agosto del año pasado, tras la inauguración, en julio, del canal principal de 32 kilómetros. En este proyecto se invirtieron $15 millones procedentes de un empréstito del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
El canal principal se terminó, pero el financiamiento no incluyó $7,5 millones adicionales para construir los canales secundarios, es decir, los que llevan el agua hacia las fincas.
Quirós explicó que están negociando un posible financiamiento para esas obras, aunque prefirió no dar detalles porque aún está en trámite. Sin embargo, dijo que son recursos del mercado local en Costa Rica y que los bancos están dentro de las probabilidades.
La obra principal se denomina "ampliación del canal del sur" o "segunda etapa del canal del sur" y forma parte del Distrito de Riego Arenal Tempisque (DRAT). El proyecto abarca territorio de los cantones guanacastecos de Cañas y Abangares, y llevaría irrigación a otras 8.800 hectáreas de la región.
Algunos recursos
El ministro Arauz y la funcionaria Quirós revelaron que ante la falta de financiamiento para las obras secundarias, se negoció con el Instituto de Desarrollo Rural (Inder), para que gire ¢250 millones con el fin específico de construir la red de canales para un asentamiento campesino llamado Agrolajas.
Además, se logró la transferencia de ¢326 millones, originalmente destinados a un proyecto en Guacimal. Quirós detalló que esos recursos son un remanente de otro proyecto con el BCIE.
Empero, la jerarca del Senara reconoció que están muy largo de obtener el total de los $7,5 millones para que efectivamente el agua llegue hasta las fincas de los productores.
Con el líquido, los finqueros podrán pasar con éxito de la agricultura tradicional de la caña, el arroz y la ganadería actuales hacia cultivos como papaya, sandía, melón y la piscicultura (cultivo de tilapias). Además, los cultivos tradicionales, como el arroz, incrementarán fuertemente sus rendimientos.
Según Quirós, la aplicación de los recursos disponibles está en el proceso de elaborar el cartel de licitación, mientras que para utilizar el aporte del Inder también se requiere de una autorización de la transferencia desde ese Instituto al presupuesto del Senara.
Reconoció que debido a los tiempos del proceso, las obras que se podrían financiar con lo disponible quedarán para el próximo gobierno, mientras que el financiamiento total todavía no se puede decir para cuándo estará.