Los altos precios del petróleo, el aumento de las tasas de interés internacionales y el debilitamientos de la economía estadounidense mermarán el dinamismo de la economía latinoamericana en lo que resta del 2006 y en el 2007.
Ese impacto se reflejará en una reducción leve de la economía mundial el próximo año.
A esa conclusión llegó el informe Panorama de la inserción internacional de América Latina y el Caribe (2005-2006) , de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), divulgado ayer en Santiago de Chile.
La Cepal prevé que el aporte de la región al crecimiento económico mundial se reduzca de un 7% a un 6,5% el próximo año.
El informe destaca que Latinoamérica es una región importadora neta de petróleo y que debe pagar un alto precio por el crudo debido a la ola de aumentos que se ha generado este año. “Esto impone altos costos fiscales y de balanza de pagos” a los países, añade.
El documento menciona que la alta factura petrolera de Centroamérica es la principal causa del deterioro del 14% en los actuales términos del intercambio, en comparación con 1998-1999.
Sobre los países exportadores de crudo, la Cepal indica que estos Estados deben aprovechar la coyuntura de tener una situación de altos ingresos, para ahorrar, reducir su deuda o invertir en el fomento de la competitividad.
Efecto externo. Según la Cepal, el incremento de la tasas de interés en EE. UU. es un factor que contribuye a un menor crecimiento de la región, ya que frena la inversión de los países.
Sin embargo, el organismo reconoce que el menor crecimiento y las mayores tasas de interés afectarían menos a Latinoamérica que en la década pasada.
La Cepal reconoce que las exportaciones se verán afectadas por una menor demanda de EE. UU., el mayor socio comercial. Sin embargo, se beneficiará del constante auge de China.
La Cepal advierte que el incierto futuro de la Ronda de Doha y la amenaza de rebrotes de proteccionismo y de una espiral aún más acentuada de acuerdos bilaterales de comercio también constituyen un peligro.