Diez de los 14 bancos supervisados en Costa Rica tuvieron, durante el primer semestre de este año, un incremento en sus utilidades cuando se comparan con los resultados del mismo periodo del 2023. Además, ninguna de las entidades financieras registró pérdidas acumuladas al finalizar la primera mitad del año, a diferencia de lo ocurrido un año atrás.
Los datos publicados por la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef) muestran que el sistema bancario costarricense tuvo una ganancia neta total (una vez descontado el pago de impuestos) de ¢152.381 millones entre enero y junio del 2024, es decir, 89% más respecto a los ¢80.603 millones en los mismos meses del año pasado.
En el mejor resultado de la banca influyó el valor del tipo de cambio y la baja en las tasas de interés en colones. La primera variable incidió especialmente entre los banco privados, cuyos activos (como los créditos otorgados) están en su mayoría en dólares. Mientras que en la banca pública tuvo un efecto favorable el menor gasto en la captación de colones debido a la baja en tasas de interés en la moneda nacional.
Una revisión más detallada muestra que el Banco Popular, Citi, Scotiabank y el Banco General fueron las entidades que registran menos utilidades en comparación con los primeros seis meses del 2023. El resto de las entidades superaron este año las ganancias consignadas de enero a junio del año pasado; incluso cuatro bancos revirtieron la pérdida semestral: Promerica, Improsa, Prival Bank y Lafise.
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El resultado de mitad de periodo de la banca ocurrió en un contexto de crecimiento en los préstamos en dólares. A junio anterior, el monto de los créditos en dólares tuvo un aumento interanual (respecto al mismo mes del año pasado) del 15,3%. El saldo prestado llegó a los $14.560 millones, según el Banco Central de Costa Rica (BCCR). La previsión de crecimiento de la cartera en moneda extranjera se mantiene por encima del 7% previsto por parte del BCCR para este año.
En tanto, el financiamiento en colones registró un incremento del 7,1% al primer semestre de este año, respecto al mismo periodo del 2023, al cerrar con un saldo de ¢10.954.453 millones, según los datos publicados por el ente emisor.
Efecto cambiario
El incremento por diferencial cambiario, durante este año, es el principal factor que impulsó el resultado semestral de la banca privada. BAC Credomatic estuvo entre las entidades que más se vio favorecida por el movimiento. En el primer semestre, la entidad tuvo una ganancia neta de ¢58.436 millones, es decir, un crecimiento de 2,3 veces más respecto a los ¢25.272 millones en el mismo periodo del 2023, según datos de Sugef.
“En el primer semestre del 2023 el tipo de cambio experimentó una apreciación de ¢52 aproximadamente, lo cual ocasionó un impacto negativo en el resultado de ese periodo. Por su parte, en el 2024, el resultado del primer semestre incorpora una depreciación de ¢3,53, lo cual le cambia la dirección al impacto y más bien resulta positivo”, destacó Laura Moreno, vicepresidenta de Relaciones Corporativas del BAC.
El tipo de cambio de venta propuesto por el BCCR, usado por los bancos para colonizar sus operaciones en dólares, inició este año con un valor de ¢526,88 mientras que, al 30 de junio pasado, tuvo una leve alza hasta llegar a los ¢530,41. En contraste, en el 2023, empezó en ¢601,99, pero a mitad de año bajó a ¢549,48, muestran los datos publicados en la web del ente emisor.
Moreno enfatizó que el resultado de medio periodo, publicado en Sugef, contiene el impacto cambiario; pero cuando se aísla el efecto, la tasa de crecimiento del primer semestre es menor.
La vocera destacó que el avance de este año se explica por ingresos como “ganancias de capital en la cartera de inversiones e incrementos en la facturación producto de una mejor actividad económica”.
A Banco Promérica, la situación cambiaría también le ayudó, pues logró revertir un resultado adverso. La entidad tuvo una utilidad neta de ¢1.881 millones en los primeros seis meses de este año, pero en el mismo periodo del 2023 registró una pérdida de ¢3.431 millones.
Luis Carlos Rodríguez, subgerente Financiero y de Operaciones de la entidad, subrayó que al mantener el banco una mayor proporción de sus activos en moneda extranjera, el diferencial cambiario tiene una influencia positiva cuando la divisa sube de precio, pero negativa cuando va en la dirección contraria.
Adicionalmente, comentó que la institución tuvo un margen financiero de más de ¢1.200 millones, como resultado de un mayor crecimiento en la cartera de crédito y una mejor gestión del costo de fondos.
“Aunque la variación en el tipo de cambio es una variable exógena, esperamos que los efectos sean menores que los observados en el 2023, debido a condiciones económicas que reducen la volatilidad esperada”, apuntó Rodríguez.
Para el exbanquero, Carlos Fernández, más allá del efecto cambiario, tanto el BAC como Promérica son entidades que crecen mucho gracias a la colocación de tarjetas de crédito.
“El negocio tarjetero con la emisión de plásticos, las tasas de interés y las comisiones que se cobran en punto de venta es lo que hace que sean, especialmente el BAC, muy exitosos en sus utilidades”, afirmó Fernández.
Intereses en colones
En el caso de la banca pública, la influencia positiva en el resultado de los primeros seis meses del 2024 llegó por el menor costo en la captación de fondos debido a la reducción de las tasas de interés en colones, principalmente, en los productos de captación de ahorro a plazo.
El Banco Nacional (BN) y el Banco de Costa Rica (BCR) tuvieron un incremento en las ganancias. En la primera entidad, la utilidad neta fue de ¢26.199 millones, lo cual implicó un alza del 70% respecto a los ¢15.470 millones en el mismo periodo del 2023.
En el BCR, las ganancias fueron de ¢25.422 millones, entre enero y junio del 2024, más del doble comparado con los ¢11.386 millones en el mismo plazo del año anterior. La entidad informó, mediante su Oficina de Prensa, que el resultado se debió a la baja en el costo del fondeo y por los mayores ingresos por la prestación de servicios.
“El crecimiento en el resultado financiero fue del 27% y se vio favorecido, principalmente, por la disminución del gasto por obligaciones con el público en 34,5% en virtud de la baja de las tasas pasivas”, recalcó el BCR.
Los datos publicados por Sugef muestran que este banco estatal pagó a sus clientes ¢77.362 millones por sus inversiones en el primer semestre de este año, frente a los ¢114.534 millones del año pasado, es decir, una reducción del 77%. Fue la institución financiera estatal donde esta cuenta tuvo la baja más relevante.
En el caso del Banco Popular (BP), las utilidades en el primer semestre de este año ascendieron a ¢11.962 millones, prácticamente el mismo nivel en el mismo periodo del 2023 cuando fueron de ¢12.064 millones.
El resultado de la institución se debe a que debió destinar parte de sus ganancias operativas a cubrir el deterioro crediticio. Efectuó estimaciones por ¢14.187 millones entre enero y junio, pero en el mismo plazo del 2023 fueron ¢5.879 millones, es decir, el incremento llegó a 141%, muestran los datos de Sugef.