La sustracción de dinero de las cuentas de clientes bancarios ascendió, entre enero del 2021 y el 22 de abril de este año, a ¢4.317 millones y $1,4 millones, según las denuncias presentadas por usuarios financieros al Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Durante el año pasado, se recibieron 3.177 casos por un monto de ¢3.045 millones y $1 millón. En tanto, entre enero 2022 y el 22 de abril pasado, se registraron 1.709 denuncias por un perjuicio económico de ¢1.272 millones y $400.000, según datos difundidos por Yorkssan Carvajal, jefe de la Sección de Fraudes del OIJ.
“Los fraudes informáticos son un tema mancomunado que compete a muchas organizaciones y a las instituciones financieras. Las personas también deben mantenerse alertas ante cualquier llamada telefónica o si reciben un link sospechoso”, detalló el funcionario judicial.
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Los datos suministrados se revelaron durante el lanzamiento de la campaña Ni un cinco más para el crimen organizado que busca reducir los delitos informáticos en Costa Rica. La iniciativa es promovida por la Asociación Bancaria Costarricense (ABC), la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef), la Oficina del Consumidor Financiero (OCF) y el OIJ.
Características de los casos
En el primer cuatrimestre de este año, la estafa más habitual para sustraer dinero a usuarios bancarios fue el phishing mediante la plataforma Sinpe (Sistema Nacional de Pagos Electrónicos). La información del OIJ muestra que el 31% de las denuncias tramitadas, es decir, 533, por la cual sustrajeron ¢149 millones y $5.700.
El phishing es un método delictivo en el cual, mediante medios telemáticos, el estafador intenta conseguir de usuarios legítimos información confidencial como contraseñas o datos bancarios.
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Las llamadas telefónicas haciéndose pasar por un funcionario bancario o de una institución pública fue la otra modalidad más utilizada por los delincuentes. El 25% de los casos de estafas electrónicas que ingresaron al OIJ fue mediante este timo, es decir, 427 denuncias.
Mediante esta vía fue por la cual se sustrajo la mayoría del dinero de los denunciantes, pues fueron ¢2.387 millones y $357.000, entre enero y el pasado 22 de abril.
En marzo de este año se presentaron la mayoría de denuncias, de los últimos 16 meses, por un total de 772 casos lo cual se atribuyó a las estafas realizadas contra clientes del Banco Nacional.
El jefe de la Sección de Fraudes del OIJ explicó que el 90% de los delincuentes, en los casos investigados, están en Costa Rica. Sin embargo, usan tecnologías que impiden su rastreo.
“La investigación de fraudes informáticos es bastante difícil porque se utilizan números enmascarados que no pueden ser rastreados. Además usan webs que nos llevan a ubicaciones fuera de Costa Rica y cuando consultamos a los operadores en el extranjero no nos brindan información. Entonces se pierde la posibilidad de obtener información del origen de la estafa”, dijo Carvajal.
Pese a las dificultades en las investigaciones, el funcionario judicial comentó que sí han logrado remitir casos al Ministerio Público para la presentación de denuncias formales contra los sospechosos.
Trabajo conjunto
La Asociación Bancaria informó de que, como parte de la campaña para combatir el crimen organizado, se conformó un Comité de Seguridad, entre entidades públicas y privadas, con el objetivo de combatir los delitos informáticos.
“La lucha contra el crimen organizado requiere del trabajo de todos, autoridades, bancos y los clientes. Los bancos asumimos el compromiso de velar por el dinero de los ahorrantes y eso nos obliga a redoblar esfuerzos en materia de seguridad y a establecer los controles necesarios para identificar a quienes prestan sus cuentas a estos grupos criminales”, manifestó Álvaro Saborío, presidente de la ABC.
El vocero detalló que las entidades bancarias invirtieron entre el 2019 y 2021, $211 millones en sistemas de seguridad informática porque el incremento de los servicios y transferencias electrónicas se disparó. Por ejemplo, en el 2020 hubo 55 millones de transacciones mediante Sinpe Móvil y, para el año pasado, se elevaron a 224 millones.
Además, solo en el 2021, hubo 4,7 millones de descargas de aplicaciones de banca en línea y las entidades financieras recibieron 470 millones de visitas a sus sitios webs, según la ABC.