Los deudores con créditos en colones y en dólares enfrentan, desde este miércoles 27 de julio, un nuevo entorno adverso debido a la subida en los intereses de referencia que determinan la tasa de interés para sus operaciones de financiamientos.
La tasa básica pasiva (TBP) se ubicará este jueves, en 4,58% desde los 4,32% en que estuvo la última semana, según el cálculo publicado por el Banco Central de Costa Rica (BCCR). La TBP es el indicador referente para 694.000 préstamos en moneda nacional a interés variable.
La tasa básica comenzó, desde finales de mayo anterior, un ascenso después de un cambio en la metodología de este indicador y por la decisión del BCCR de subir su tasa de política monetaria por las presiones inflacionarias que enfrenta Costa Rica.
Adicionalmente, la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) acordó, este miércoles, una cuarta alza consecutiva de sus tasas de interés, en 0,75 puntos porcentuales (p. p.), para llevarlas a un rango entre 2,25% y 2,50%, desde el 1,5% y 1,75% anterior. La decisión, tomada para frenar la inflación, tendrá consecuencias para los deudores en dólares.
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Ante el panorama de subida de tasas, los deudores cuentan con varias tácticas para sortear el aumento de sus obligaciones, si su operación está a interés variable y se ve influida por el movimiento de la tasa referencia.
Ordene sus finanzas
Para Guillermo Vargas, socio de la firma VV&A Consultores especializada en temas financieros y tributarios, el primer paso para el deudor, sea una persona o empresa, es conocer cuáles son sus gastos mensuales y analizar cuáles pueden recortarse para contar con más dinero.
“La primera parte, para enfrentar la realidad actual, es organizarse y verificar la estructura de gastos. Entender dónde estoy gastando, cómo estoy gastando y si alguno de esos gastos es susceptible a algún tipo de ahorro. El ejemplo más habitual es que se están pagando varias aplicaciones en línea, para ver series o películas, pero no se utilizan todas”, recalcó el especialista.
Vargas aseguró que las personas deben hacer un esfuerzo de realmente evaluar cuáles servicios y productos adquiridos cada mes, son realmente necesarios.
Cuando las dificultades por el aumento de las tasas de interés son de una compañía, el abordaje es diferente. El experto comentó que entre las malas prácticas, en especial para las pequeñas y medianas empresas (pymes), es la mezcla entre las finanzas de la empresa y las de sus propietarios.
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“La mayoría de las empresas son pymes, y es habitual encontrar desórdenes financieros porque se unen gastos personales con empresariales. Entonces, lo primero es organizar y separar”, recalcó.
Negociar condiciones
Una vez que el deudor tiene claridad sobre su estructura de gastos, el siguiente paso sería ver la posibilidad de renegociar la operación de crédito o hasta trasladar sus deudas a otra entidad financiera si le ofrecen mejores condiciones.
Alexander Otoya, gerente de Finanzas de Coope Ande, explicó que la banca brinda las opciones de modificar la estructura de los préstamos bajo las reglas dictadas por la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef).
“La entidad podrá ofrecerle a la persona o empresa una modificación en los plazos y de tasa de interés de la operación. Pero también las familias y empresas pueden reacomodar su pasivo, es decir, refundir algunas deudas”, comentó el especialista.
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Otoya agregó que los deudores deben acercarse a su entidad financiera cuando detectan un problema en su flujo y antes de caer en impago, con el objetivo de resguardar su historial crediticio porque es la forma de obtener un cambio en las condiciones de la deuda y nuevos financiamientos a futuro.
La reestructuración total de la operación también es posible, pero en este caso la normativa de regulación limita la cantidad de readecuaciones a las cuáles puede someterse a una modificación en las condiciones del crédito, en un plazo de 24 meses.
Para Guillermo Vargas, especialista en Finanzas de la firma consultora VV&A, los arreglos de pago deben ir acompañados de un proceso de compromiso para no incrementar el consumo, en especial con tarjetas de crédito que tienen altas tasas de interés.
Según Vargas, una alternativa para mejorar las deudas es planificar los pagos dando prioridad a las que tengan una mayor tasa de intereses, sin descuidar y seguir pagando el mínimo de otras deudas.