La empresa ensambladora de equipos médicos Baxter Healthcare planea seriamente ampliar su planta en el país, aunque los mismos jerarcas reconocen que existen otros lugares que ofrecen mejores condiciones y que analizan los beneficios que les concedería el Gobierno de Costa Rica.
Así lo dio a conocer el gerente financiero de la compañía, Magin Mora, en una entrevista con La Nación. El jerarca exaltó los logros y el crecimiento que ha tenido la producción de la planta -ubicada en Cartago-, pero reconoció que se hace necesario ampliar su infraestructura.
La producción anual de esta ensambladora es cercana a los $70 millones (¢16.400 millones) y la tasa de crecimiento de la producción durante los últimos tres ha sido de un 20 por ciento.
Dicha planta representa una inversión cercana a los $12 millones (¢2.800 millones). No obstante, si la mencionada ampliación se llega a concretar, la inversión y el número de empleados podría subir en un 50 por ciento. Actualmente, la empresa cuenta con una planilla de 1.100 personas.
Baxter tiene su casa matriz en Estados Unidos y se dedica a la producción (en Costa Rica) de catéteres de succión (para inyectar suero a los pacientes) y sets de alimentación intravenosa. Actualmente, se fabrican una serie de cinturones magnéticos, los cuales son colocados a los pacientes que son sometidos a cirugía. Esta manta ayuda al cirujano a sostener los instrumentos y llevar un inventario de ellos en la operación.
Corredor tecnológico
Mora confirmó que la empresa piensa seriamente en ser parte del corredor tecnológico que impulsa el Gobierno. Este proyecto implica la creación de una zona exclusiva para la instalación de empresas dedicadas a la alta tecnología (como la informática), que va desde Cartago hasta San Ramón. En este corredor ya se encuentra instalada la firma de microcomponentes Intel.
Sin embargo, el gerente indicó que la decisión de ampliar la empresa se tomará a principios o mediados del próximo año.
"Se está analizando de lleno la posibilidad de expandirse. Ya la capacidad de producción llegó a su límite y obliga a que se haga esa ampliación", aseguró Mora, quien agregó que se estudia con el Gobierno el tipo de incentivos que se ofrecerían.
Baxter llegó a Costa Rica en 1987, luego de que la corporación realizara una serie de estudios sobre los países que le ofrecían menores costos y tuvieran una ubicación estratégica para la distribución de sus productos.
En 1992, la casa matriz decidió hacer una reestructuración de las plantas y como resultado cerró la que se ubicaba en Puerto Rico, de ahí que la ensambladora tuvo que ampliarse. La inversión en ese momento pasó de $2 millones a $12 millones y el número de empleados subió de 150 a 400.
Los artículos que se producen en Costa Rica no se comercializan directamente en el país puesto que tienen que pasar por un proceso de esterilización con energía nuclear que sólo se realiza en Estados Unidos. No obstante, los implementos se comercializan en todo el mundo.