Brasilia. AP El gobierno brasileño declaró la semana anterior su desagrado y examina si Estados Unidos siguió las normas de la Organización Mundial de Comercio (OMC) en una caso sobre exportaciones de jugo de naranja brasileño a aquel país.
El gobierno brasileño recibió con desagrado la decisión, dijo la cancillería en un comunicado.
" El gobierno brasileño y el sector privado están realizando cuidadosos análisis de las decisiones para verificar si las disciplinas de la OMC fueron plenamente observadas", añadió el ministerio en su comunicado publicado en su sitio de Internet.
La declaración salió al paso de un fallo emitido el 8 de febrero por la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos.
El dictamen asegura que las exportaciones brasileñas de jugo de naranja han causado daños a los industriales estadounidenses porque es vendido en aquel país por debajo de los costos de producción.
El jugo de naranja brasileño es reconocido en el mercado internacional como muy competitivo en razón de sus bajos costos de producción, dijo el ministerio.
La nueva medida frustra lass expectativas de los productores brasileños de acceso libre al mercado norteamericano, añadió.
El caso data de 2004 cuando los cultivadores de naranja y productores de jugo en Florida pidieron a la Comisión de Comercio Internacional estadounidense y al Departamento de Comercio de Estados Unidos investigar las prácticas comerciales de los productores brasileños e imponer aranceles.