En abril, cuando Café Britt empezó a ver signos de mayor confianza en el mercado, sacó del congelador un agresivo plan de expansión en el extranjero y en el mercado local.
Dicho programa incluye la instalación de su primera tienda en el aeropuerto de la caribeña isla de Antigua, dos nuevas tiendas en hoteles de la cadena Libertador en Urubamba y Paracas, en Perú , y una tienda en la ciudad de Iquique, en Chile.
Asimismo, trabaja en la instalación de una planta tostadora de café en Cancún con la cual pretende ampliar sus negocios en México, pero utilizando café de alta calidad propio de ese país. La inversión ahí es de $500.000.
La empresa también lucha por quedarse con, al menos, dos concesiones para operar en aeropuertos de otras islas caribeñas y abrir ocho tiendas en Costa Rica.
En total invertirá unos $5 millones en los próximos 12 meses.
“A nosotros nos sirve en momentos como éste (de crisis) invertir porque podemos lograr contratos con mejores condiciones”, dijo Pablo Vargas, gerente general de Café Britt.
“Cuando el mundo se recupere vamos a ser una empresa más competitiva”, aseveró.
Con la instalación de la tostadora de café en Cancún la empresa pretende fortalecer su presencia en México. En ese país, la empresa hasta ahora ha estado centrada en la venta de café y chocolates en hoteles de la Riviera Maya.
Sin embargo, para entrar a ese mercado el café tico paga un arancel del 75% lo cual impide el crecimiento. Vargas explicó que con la tostadora podrán procesar café de alta calidad mexicano para luego colocarlo en los mismos hoteles o abrir sus propias tiendas.
Café Britt tiene dos líneas de negocios complementarias: la venta de café y chocolates, así como las tiendas ubicadas en puntos turísticos como aeropuertos y hoteles.
Marca país. De acuerdo con Vargas, el éxito de las tiendas y los productos ofrecidos bajo la marca Café Britt es que encierran el concepto de cada país donde están.
El diseño de los empaques, las artesanías y, en muchos casos, la materia prima utilizada para hacer los productos evocan al país o ciudad donde se ubica la tienda.
Por ejemplo, cuando Café Britt llegó a Perú tomó una fruta famosa llamada Lucuma y hoy la vende cubierta con chocolate, un producto muy parecido a las “Guayabitas” que fabrica para Costa Rica.
La Lúcuma con chocolate es el producto más vendido por la compañía en sus tiendas en Perú.
En tanto, para las dos tiendas ubicadas en el aeropuerto de Miami fabricaron mermelada de limón cubierta con chocolate blanco y de naranja con chocolate oscuro.
Ahora, con la llegada a la isla de Antigua, Café Britt enfrenta el reto de encontrar una empresa que procese la piña negra– una fruta propia de la región– para obtener una la jalea que distribuirá como relleno de chocolate. En esa isla, la empresa invertirá $1,3 millones.
Expansión local. En nuestro país Café Britt planea abrir ocho tiendas en los próximos 12 meses.
Las aperturas más próximas se realizarán en los hoteles Cariari y Corobicí en San José, informó Pablo Vargas.
En ambos casos ya cuentan con los contratos pero se está a la espera de que los hoteles finiquiten con los negocios que actualmente operan los locales.
Sobre los demás proyectos, Vargas no dio mayores detalles.
La empresa acaba de abrir dos tiendas en el Hotel Paradisus Playa Conchal con las cuales llegó a un total de 50, incluyendo las que opera en otros seis países.
Pero no todo ha sido ganar para Café Britt. La firma tuvo que dejar en julio una de las dos tiendas que operaba desde el año 2007 en el Aeropuerto internacional Juan Santamaría.
El espacio de 100 metros cuadrados se sacó a licitación pública y fue adjudicada a Bertero S.A firma que ya tiene dos tiendas en la terminal aérea.