San José
No es solo vender cerveza, se trata de negocios cerveceros. La venta de artículos relacionados con las diferentes marcas de esta bebida en suelo costarricense y hasta la apertura de brewpubs (restaurante o pub que produce su propia cerveza para ser vendida dentro de sus instalaciones ) son algunos de los terrenos hacia donde se mueven los fabricantes nacionales.
Este lunes 8 de mayo, por ejemplo, la Cervecería Costa Rica anunció la apertura de "La tienda de la birra". Se trata de un espacio donde se ofrecerán artículos oficiales de sus marcas: Imperial, Pilsen y Bavaria, entre otras.
Saulín Arias, gerente de marcas Premium, Innovación y Retail de la compañía, explicó que se trata de un concepto de venta al detalle donde se podrán encontrar camisetas, gorras, pantalonetas, llaveros, jarras, y otros artículos.
"Está pensado para que el consumidor costarricense y extranjero que ama y se siente identificado con nuestras marcas puedan tener un souvenir para ellos o un regalo especial para ese amigo que vive dentro o fuera de Costa Rica", mencionó Arias.
El anuncio de la tienda, que se ubicará en las inmediaciones del edificio corporativo de Florida Ice and Farm Company S.A. (Fifco) en Heredia, se une a esfuerzos pasados de la firma por fortalecer sus marcas.
En diciembre del 2016, Fitco anunciaba la apertura de su primer "Bar Imperial" en el aeropuerto internacional Juan Santamaría.
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Con sabor local. Los cerveceros artesanales costarricenses también han salido en busca de la extensión de sus marcas y lo han alcanzado.
Hoy se trata de un sector que reúne, por lo menos, 80 cervecerías artesanales en el país en diferentes etapas de desarrollo.
Costa Rica Beer Factory (CRBF) es un ejemplo de ese paso a paso en el desarrollo y consolidación de una marca.
Esta firma empezó en el 2013 con su casa Beer Factory en Barrio Escalante y ya tiene su planta de producción en Heredia.
Además, recientemente, abrieron otro restaurante en Avenida Escazú, de 180 metros cuadrados (m²), además de locales en Plaza Real Alajuela y en Cariari, Heredia.
Según datos compartidos por la empresa en El Financiero, en sus restaurantes se comercializan sus cinco marcas fijas y de nueve firmas costarricenses, que representan más de 40 tipos de cerveza, servidas en sifón o en botella.
El crecimiento de CRBF se conjuga con espacios de enseñanza, en su Instituto Beer Factory School, sobre maridaje, historia, componentes, módulos de producción de la bebida y tours en la fábrica.
En la misma línea también destaca Costa Rica Craft Brewing, que se inició en el mundo de la cerveza artesanal en el 2011, cuando abrió su fábrica. A la fecha, ofrece otros servicios en establecimientos propios, con menús para maridaje, cursos de preparación de cerveza y tours.
Conocidos por sus cervezas Segua y Libertas, la compañía también cuenta con mercancías a la venta, desde camisetas, gorras hasta vasos (pintas de 16 onzas y 11 onzas).
Las ventas las realizan en línea y en la planta de la cervecería en Ciudad Colón.
Pequeños esfuerzos. Las ideas por posicionar las marcas no solo llegan de firmas consolidadas. Mariano Gómez, socio de la cervecería artesanal Arboleda explica sobre otros conceptos que se abren espacio en el mercado.
Un festival para promocionar las cervecerías locales, llamado Distrito Cervercero, es otro de los conceptos que ha salido al paso para impulsar las marcas nacionales.
En asociación con otras tres cervecerías: Calle Cimarrona, Sin Corbata, y Cervecería Gracia, la artesanal Arboleda abre las puertas de su fábrica en San Francisco de Dos Ríos, cada tres meses, para acercar al público con los procesos de producción, al tiempo que aprovechan para mostrar sus mercancías —no solo cerveza—.
"En Arboleda acabamos de sacar una nueva línea de camisetas, por ejemplo, la gente nos puede buscar a través de la red social Facebook", comentó Gómez.
Arboleda produce las cervezas Surá, Caoba e Injerto que ya pueden encontrarse en negocios en San Pedro, Cartago, Heredia y Jacó.