Las modalidades para adquirir un vehículo continúan diversificándose en el mundo. Además de la compra tradicional, sea al crédito o al contado, un estudio reciente reveló que un alto porcentaje de jóvenes en algunos países está interesado en dejar de tener carro propio y optar por un modelo de suscripción. En Costa Rica, otras opciones están ganando terreno.
El Estudio Global del Consumidor Automotriz 2024, elaborado por la firma Deloitte, indica que en países como India, China y naciones del Sudeste Asiático, más del 45% de los encuestados entre 18 y 35 años preferirían un modelo de suscripción en lugar de tener un vehículo propio. En Japón, Alemania, Estados Unidos y Corea, el interés oscila entre el 34% y el 26%.
En Latinoamérica, en los dos países incluidos en el análisis, el porcentaje es de 26% en Argentina y 35% en México. Las principales razones mencionadas son la comodidad, la flexibilidad y la disponibilidad de vehículos.
Con el modelo de suscripción, la persona interesada adquiere el uso de un vehículo mediante el pago de una cuota que varía según el modelo. Alberto Torrijos, socio líder del Sector Automotriz en Deloitte Spanish Latin America y coordinador del estudio para la región, explicó que es notorio el cambio en el esquema de adquisición, donde antes primaban los modelos de financiamiento.
“La razón fundamental de las suscripciones responde a que la propiedad vehicular ha cambiado por la proliferación de empresas que ofrecen este tipo de servicios y a las preferencias de los consumidores”, indicó Torrijos, quien añadió que la población joven, entre los 18 y 34 años, está más inclinada a renunciar a la adquisición de un vehículo y prefiere opciones por suscripción.
El estudio incluyó el análisis de 25 países y 25.000 consumidores con el interés de conocer el comportamiento del consumidor automotriz.
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“Prefieren no gastar su capital en este tipo de activos; las opciones de movilidad brindan flexibilidad y están en crecimiento a nivel mundial. En Latinoamérica, el consumidor es muy sensible al precio, lo cual es un factor determinante en la decisión de compra", señaló Torrijos.
El contrato de alquiler por suscripción es más flexible en muchos aspectos. La persona puede ajustar el plazo (meses, un semestre, un año), cambiar el carro en plazos cortos y modificar la cantidad de kilómetros que se desea recorrer cada mes, entre otras opciones, de acuerdo con la plataforma española Bipi.
Opciones más populares en Costa Rica
En Costa Rica, el servicio Purdy Renting by Kinto, de la marca Toyota, ofrece una alternativa de movilidad sin necesidad que involucre la compra del vehículo. Allan Rodríguez, director de B2B del Grupo Purdy y coordinador de este servicio, explicó que el renting está logrando demanda. Por otra parte, están analizando reactivar la suscripción como proyecto piloto.
Este servicio estuvo disponible antes de la emergencia por la pandemia por la covid-19, pero fue suspendido. Rodríguez refirió que prevén reactivarlo con los clientes del taller de servicios del grupo, a manera de prueba, para evaluar la demanda. Aclara que en la suscripción los trámites son más breves y con menos requisitos; además, no existe penalización por suspender el servicio.
“Estamos en etapa de valoración para ver si comenzamos a hacer un plan piloto con la suscripción para clientes de nuestros talleres. No es oficial; es solo una etapa de planteamiento”, añadió Rodríguez.
Rodríguez también afirmó que el servicio de suscripción está teniendo mayor aceptación en algunos países. Con esta modalidad, los consumidores pueden recoger el vehículo en un punto, utilizarlo y devolverlo en otro, sin necesidad de retornarlo al lugar de origen. En Europa y Estados Unidos, este modelo es más frecuente. En Latinoamérica, el crecimiento no es tan rápido, comentó Rodríguez.
Paulo Vargas Jiménez, presidente de la Asociación Costarricense de Auto Rentistas (ACAR), considera que las opciones de movilidad no tradicionales en el país son sensibles a los precios, ya que incluyen servicios adicionales que encarecen los costos para las empresas, razón por la cual aún no han alcanzado un auge en el país.
Vargas recordó que el servicio ZipCar, que operaba sin intermediación de agentes de servicio y permitía la renta de vehículos por medio del celular, no logró mantenerse por mucho tiempo. Aunque la renta tradicional de vehículos se enfoca en el turismo extranjero, resultaba un 15 % más económica para los nacionales respecto a las opciones por suscripción, añadió Vargas.
El renting, el modelo sin prima
Vargas considera que el renting sí está teniendo aceptación en el país. Este servicio consiste en el arrendamiento de un vehículo por plazos de 1 a 5 años, sin necesidad de depósito y con el pago de una cuota mensual fija que incluye servicios como mantenimiento preventivo y asistencia en carretera. Actualmente, la mayor demanda proviene de empresas y, en segundo lugar, de profesionales independientes.
El renting establece términos para el cumplimiento de los plazos contratados. Entre los requisitos para personas físicas están la certificación de ingresos o constancia salarial, copia de la cédula, completar dos formularios, la declaración de renta del último periodo si aplica y los estados de cuenta de los últimos seis meses. Para personas jurídicas, los requisitos son otros.
La diferencia con el leasing es que en este último se requiere un porcentaje de prima para adquirir el vehículo y generalmente no incluye servicios adicionales, explica Vargas, que representa a 16 empresas que ofrecen 15.000 vehículos en renta.
Esteban Noguera, gerente de Arrendamiento de Budget, refirió la empresa es la pionera del renting en el país desde 2005 y la demanda ha venido en crecimiento año con año. Los vehículos lideres son los modelos SUV y Pick Up.
Añadió que por ahora no desarrollan nuevos productos o servicios; sin embargo, mencionó que su estrategia de innovación les permite estar preparados para adoptar modelos de negocio emergentes, según la demanda y las tendencias del mercado.
Leasing y renting en crecimiento
José Paulo Martínez, gerente de Innovación y Productos del Grupo Financiero Cafsa, división financiera del Grupo Purdy, destacó que los jóvenes prefieren opciones como el leasing y el renting, que representan un 55 % de preferencia frente al 45 % del financiamiento prendario tradicional.
Martínez explicó que ofrecen una opción de leasing para asalariados con una prima del 10 %, que ha tenido buena acogida entre colaboradores que laboran en el régimen de zonas francas. Para profesionales independientes, el renting es popular porque garantiza ahorro en gastos operativos y beneficios fiscales.
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El leasing tiene dos variantes: el arrendamiento operativo financiero que permite al usuario acceder al vehículo al final del plazo contratado con opción de cambiar el vehículo sin penalidad antes del fin del contrato, y el arrendamiento operativo puro, que obliga a reemplazar el bien una vez concluido el contrato. En ambas modalidades, el cliente paga una cuota fija durante el plazo, indicó Martínez.
En el aspecto tributario, en el leasing financiero es posible deducir el 100% de los intereses y el seguro; en el caso del capital, puede deducirse hasta dos veces la depreciación mensual. En el leasing operativo puro, al igual que en el renting, se cuenta con el 100% de escudo fiscal sin escalamiento por depreciación.
La movilidad eléctrica
Silvia Rojas, directora ejecutiva de la Asociación Costarricense de Movilidad Eléctrica (Asomove), asegura que la tendencia mundial es dejar el vehículo particular y utilizar opciones compartidas o de plataformas, incrementando la electrificación para reducir costos económicos y ambientales asociados a los combustibles fósiles.
Señaló que en Costa Rica ya existen más de 600 vehículos 100% eléctricos operando en Uber, además de instituciones públicas y privadas que están electrificando sus flotas. Mencionó también que en algunos países de Suramérica ya funcionan buses eléctricos bajo modelos similares al de suscripción.
Rojas concluyó que, si Costa Rica desea cumplir con el Plan Nacional de Descarbonización, que busca eliminar las emisiones de gases de efecto invernadero para 2050, la estrategia debe centrarse en reducir y electrificar la flota vehicular.