EscucharLa confianza de los consumidores reforzó su tendencia a mejorar hacia finales de año y bajó el porcentaje de las personas que pensaban que las tasas de interés para préstamos de dinero y los precios van a subir para el 2023.
Así lo muestran los resultados de la IV Encuesta del Consumidor del 2022, de la cual surge el índice de confianza del consumidor, publicados este miércoles 7 de diciembre por la Escuela de Estadística y la Unidad de Servicios Estadísticos de la Universidad de Costa Rica (UCR).
El índice de confianza del consumidor aumentó de 39,6 puntos en agosto del 2022, a 44 puntos en noviembre del 2022, con lo cual se refuerza una tendencia al alza que viene desde agosto del 2020. Su valor oscila entre 0 (pesimismo más acentuado) y 100 (máxima confianza).
Este índice se calcula con las respuestas a cinco preguntas: dos referentes a las condiciones económicas actuales y otras tres relacionadas con las expectativas económicas. Para obtenerlo se asigna el valor 100 si la respuesta es favorable, 50 si es neutra o no sabe y 0 si es desfavorable. Luego se calcula un promedio con los cinco puntajes.
Fernanda Alvarado Leitón, coordinadora de la encuesta, aclaró que un 44 todavía está en el terreno de la incertidumbre; no obstante, hay tres situaciones positivas que pueden influir en la mejora: la desaceleración de la inflación, la baja en el dólar y la reducción en los precios de los combustibles.
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Alvarado comentó que también existen elementos negativos en el ambiente como el incremento en las tasas de interés, el temor a una recesión en algunos países y la desaceleración que se espera para la economía de Costa Rica, pero al parecer pesan más los positivos, al menos por este momento.
Para realizar esta encuesta se entrevistaron a 721 personas mayores de 18 años en todo el territorio nacional, usuarias de teléfono celular. El error de muestreo se situó en más o menos 1,8 puntos para el ICC y en más o menos 3,7 puntos para los porcentajes, con un nivel de confianza del 95%.
La encuesta también muestra otros resultados positivos en cuanto a las expectativas de tasas de interés y capacidad de compra.
Respecto al resultado de agosto del 2022, descendió el porcentaje de personas que pensaban que las tasas de interés para préstamos de dinero iban a subir (65,9% en agosto versus 53,4% en noviembre).
También en agosto un 39,7% esperaba un aumento en los precios y en noviembre bajó a 35,4%.
Por su parte, el porcentaje de gente que pronostica una mejoría en sus ingresos familiares casi no se modificó (52,9% en agosto y 53,4% en noviembre, ambas cifras dentro del error de muestreo).
¿Comprar casa o carro?
Estos resultados se reflejan en una mejora en el ánimo para comprar casa y carro, aunque la mayoría todavía considera que es una mala idea.
Un 69,1% opina que son malos tiempos para comprar casa y 76% piensa así para comprar carro. En agosto estos porcentajes eran de 74,7% y 84,9%, respectivamente.
Por otra parte, la previsión del aumento en los precios de los combustibles para el próximo año descendió a su valor más bajo desde mayo del 2020 y mantuvo la tendencia a la reducción de todo el 2022: ahora el 58,3% de las personas esperan un encarecimiento de los hidrocarburos en el 2023, menor al 67% de agosto.
Esto podría deberse a la caída de la cotización del precio del barril de crudo en el mercado internacional, que pasó de los $117 a mediados de año a $90 en este noviembre.
De la encuesta también surge una calificación a la política económica de la administración del presidente Rodrigo Chaves y la conclusión es que el balance sigue siendo positivo aunque se debilita. De momento es más el grupo de personas que aprueba la labor económica del Ejecutivo (31,0% dijo trabajo bueno) que el que la desaprueba (28,3% dijo trabajo pobre).
Sin embargo, la brecha entre estos dos porcentajes pasó de 11 puntos porcentuales en agosto, a solamente tres puntos porcentuales en noviembre. Esto se debe a una reducción de 4,5 puntos porcentuales en el porcentaje de consumidores que calificó el trabajo de la administración Chaves como bueno, aunado a un aumento de 3,4 puntos porcentuales en el porcentaje que lo calificó como pobre.
En el ámbito social, el porcentaje de consumidores que espera mayor pobreza en los próximos 12 meses decreció de 46,5% a 41,2% entre agosto y noviembre y el que espera mayor desempleo se mantuvo estable en 31,8%.
