La importación de vehículos eléctricos con terceros o por propia cuenta ha despertado interés entre los consumidores, especialmente después de que el Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC) publicara estudios donde revela que en algunos casos existen altos márgenes de comercialización de las agencias de vehículos.
Aunque esta práctica puede resultar en ahorros para los compradores, también implica ciertos riesgos. Por esta razón es importante tener en cuenta los pro y los contra de esquivar a los distribuidores oficiales y buscar otro tipo de intermediario para hacerse con un automóvil eléctrico.
Sebastián Mata, investigador en ingeniería electromecánica del Instituto Tecnológico de Costa Rica (TEC) y del Laboratorio de Investigación en Vehículos Eléctricos (LIVE), explicó que no existe una respuesta certera a si es buena idea adquirir un vehículo de esta forma o no. Eso dependerá de los riesgos que estén dispuestos a asumir los consumidores, según los beneficios que observe en la inversión.
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El especialista señaló que el principal riesgo radica en adquirir vehículos por medio de terceros informales, ya que estos no ofrecen garantías sobre los automóviles.
La importación de modelos de otros mercados, como el europeo, asiático o norteamericano, puede presentar dificultades en términos de configuración, diseño y disponibilidad de repuestos en Costa Rica, afirmó Mata.
Aunque en en el país existen talleres especializados que pueden solucionar los problemas, algunos escáneres podrían tener dificultades para detectar las fallas en vehículos no homologados para el mercado costarricense.
A pesar de esto, Mata mencionó que siempre se logra dar solución al consumidor, debido a que existen talleres bastante preparados. En algunos casos, por contactos que estos talleres y técnicos tienen en otros países es posible dar con un repuesto o una solución a un problema, según indicó.
“No tengo conocimiento de alguien que tenga su vehículo eléctrico parqueado por no recibir mantenimiento o arreglo”, indicó.
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Silvia Rojas, directora ejecutiva de la Asociación Costarricense de Movilidad Eléctrica (Asomove), mencionó que tampoco conoce algún caso en el que los usuarios no hayan encontrado solución a los problemas de sus vehículos en el país. Sin embargo, menciona que a algunos asociados de Asomove les han negado la atención en las agencias oficiales cuando no compraron los automóviles directamente con ellas.
Dificultades para el mantenimiento en agencias
Como mencionó Rojas, es posible que los consumidores encuentren dificultades para obtener mantenimiento en las agencias distribuidoras autorizadas, aunque esto no debe ser una limitante, segun indicó el investigador del TEC.
Agencias, como FACO (Honda), informaron de problemas durante los últimos meses al recibir solicitudes de servicio en modelos de carros que no están autorizados para el mercado costarricense.
Así lo indicó la agencia y la Asociación de Importadores de Vehículos y Maquinaria (Aivema), que defendió que la falta de aprobación por parte de las marcas oficiales impide que las agencias puedan brindar respaldo para esas unidades en específico, pues no cuentan con repuestos ni software para esos modelos.
Carlos Aguilar, director ejecutivo de Aivema, mencionó que el todoterreno e: NS1 de Honda, y otras unidades de Volvo y Volkswagen dirigidas para el mercado asiático han ingresado a Costa Rica sin contar con la habilitación oficial de la marca para ser distribuido en el mercado nacional.
Según indicó el especialista del TEC, se ha dado la situación en la que algunas agencias niegan el servicio a los usuarios de vehículos que ellos tienen a la venta, por el hecho de no haberlo adquirido directamente en esa agencia e importarlo por su parte o con un tercero.
En cuanto a la obligación de las agencias oficiales de brindar mantenimiento a los vehículos que no fueron adquiridos directamente en ellas, la Dirección de Apoyo al Consumidor del MEIC indicó a La Nación que el tema está siendo discutido en un proceso contencioso administrativo. La respuesta definitiva dependerá de la decisión de los tribunales.
Talleres especializados se fortalecen
Sebastian Mata mencionó que en Costa Rica cada vez existe mayor formación de técnicos en vehículos eléctricos, y ejemplificó que la escuela de ingeniería electrónica del TEC mantiene un convenio con empresas para generar programas técnicos de diagnóstico de vehículos eléctricos.
Por otro lado, Silvia Rojas indicó que Asomove trabaja de la mano con distintas agencias importadoras que tienen sus propios talleres, o que mantienen convenios con talleres tercerizados, cuyo servicio se incluye en la garantía en la venta del vehículo eléctrico.
“Hay importadores que tienen créditos con la banca nacional. Los bancos mantienen un filtro importante, exigen garantía del vehículo y piden que la agencia tenga taller”, explicó Rojas.
EV Imports es una agencia que importa vehículos de la marca Tesla, y brindan el servicio de taller como parte de sus prestaciones. Mariano Ávalos, propietario del negocio mencionó que en su taller también se reciben vehículos de personas que compraron su carro con otros importadores.
En resumen, al momento de comprar un vehículo eléctrico, tanto Asomove como la Dirección de Apoyo al Consumidor, recomendaron asesorarse sobre las características técnicas, evaluar el respaldo de cada marca en el país y considerar la garantía y el soporte de los talleres.
De igual forma, Mata recomendó a los usuarios asesorarse en las características técnicas de cada vehículo, y mencionó que si se va a decantar por alguna marca asiática, sea una reconocida que ya cuenta con varias unidades en el país, pues las marcas poco conocidas pueden ser más riesgosas.
El investigador concluyó que suelen funcionar mejor los vehículos cuya batería es enfriada con refrigerante y no por aire, y mencionó que es vital revisar el estado de salud de la batería en caso de que el vehículo adquirido sea usado.