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La temporada navideña llegó, y con ella, la tradicional transformación en la decoración de los hogares. Este cambio suele incluir la instalación de iluminación propia de la época, lo que conlleva a un aumento en el consumo de energía eléctrica y a un incremento en el valor de las facturas. Especialistas consultados estiman que el recibo de la luz puede aumentar cerca del 20% por este motivo.
¿Es posible lograr un ahorro en el valor de la facturación en esta temporada? La Nación presenta algunas recomendaciones brindadas por ingenieros eléctricos que consideran que lo primordial, antes del factor económico, es garantizar la seguridad de las personas y los inmuebles.
Para los especialistas, un aspecto clave es evitar la sobrecarga de los enchufes, conectando varios aparatos o instalaciones de luces. En este punto, Eduardo Escalante, director de la Carrera de Ingeniería Eléctrica de la Universidad Fidélitas, aconseja mantener en constante revisión el sistema eléctrico de los hogares y garantizar el buen funcionamiento de los interruptores o breakers, que actúan de barrera de los cortocircuitos.
Uno de los errores más comunes es conectar varias instalaciones de luces navideñas o varias regletas en un mismo tomacorriente, generando una sobrecarga. Escalante destaca la importancia de utilizar regletas para conectar varios aparatos o líneas de luces navideñas en lugar de conectarlos directamente al enchufe de la pared.
La regleta, sugiere, debe comprarse en un sitio especializado en estos artículos. Este dispositivo tiene la particularidad de contar con un apagador, pero además, deja de funcionar cuando hay un sobrecalentamiento que sobrepase su capacidad, estimada en 15 amperios, explica Escalante.
Las luces LED
Una opción que garantiza el ahorro en el consumo de energía eléctrica son las luces LED (Light-Emitting Diode o Diodo Emisor de Luz). Andrés Argüello, profesor e investigador de la Escuela de Ingeniería Eléctrica de la Universidad de Costa Rica (UCR), explica que estas luces generan luminosidad sin generar calor, a diferencia de las tradicionales luces incandescentes.
Ambos especialistas coinciden en que las luces LED representan la mejor opción, ofreciendo un ahorro de entre el 80% y el 100% en comparación con las luces incandescentes, cuya característica es calentarse por el paso de la energía.
Argüello subraya que las luces incandescentes representan un riesgo debido al sobrecalentamiento, especialmente si están cerca de objetos inflamables. Con el tiempo, el precio de las luces LED ha disminuido, convirtiéndolas en una opción accesible.
Escalante aconseja verificar la calidad de estas luces y comprarlas en comercios formales, prestando especial atención a las certificaciones, como la certificación UL que se refleja en las etiquetas. El costo de este artículo varía por el diseño y cantidad de luces, en los supermercados se ofertan desde los ¢1.200.
Otras opciones incluyen la compra de temporizadores, que permiten programar el encendido y apagado de las luces. De acuerdo con el sondeo realizado en sitios que distribuyen artículos eléctricos, el precio del temporizador oscila entre ¢4.700 y ¢40.200.
Además, se desaconseja mantener encendida la iluminación navideña toda la noche o cuando no hay personas en el hogar para evitar riesgos. Las luces de batería o con carga solar también son mencionadas como opciones para el ahorro energético.
Ambos especialistas también recomendaron el uso eficiente de los electrodomésticos y su revisión constante, para garantizar el ahorro en la facturación.
Desde el 1.º de octubre entró en vigencia la rebaja de las tarifas eléctricas para todos los abonados del país, válidas hasta el 31 de diciembre de este año. En este sentido, Escalante destaca la importancia de tener en cuenta estos rangos al utilizar todos los artículos eléctricos, principalmente los electrodomésticos.
