Costa Rica carece de un análisis oficial y actualizado de la cadena de comercialización, para conocer la causa de los altos márgenes de precios entre el productor y el consumidor final de los productos perecederos (frutas, verduras, carnes frescas, entre otros ).
Tampoco está claro cuándo estará disponible el análisis y quiénes participan en su elaboración, situación que queda en evidencia en las respuestas que dieron, a La Nación, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y el Ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC), por separado.
Consultado sobre el análisis de la cadena de intermediarios, el viceministro del MAG, Fernando Vargas, indicó, por medio de un mensaje, que han solicitado el estudio al MEIC pero todavía no reciben respuesta.
“Esos análisis nosotros no los hacemos, quien tiene la facultad de poder hacerlos es el MEIC, nosotros se los hemos solicitado pero hasta el momento no hemos tenido información al respecto, ellos son los que hacen los análisis de los procesos de intermediación entre la producción primaria y el consumidor”, indicó el jerarca.
Agregó que han solicitado esta información al MEIC “para ver cómo se comporta la cadena y dónde están esas diferencias grandes que dicen los productores entre lo que les pagan a ellos y lo que paga el consumidor. La entidad facultada por sus competencias es el Ministerio de Economía, Industria y Comercio”.
Pero el MEIC, por medio de su oficina de prensa, emitió una posición distinta: “un estudio que se ha venido realizando conjuntamente entre entidades del sector agro como el MAG, Sepsa (Secretaría Ejecutiva de Planificación Sectorial Agropecuaria), el MEIC, entre otras, será presentado a los jerarcas en las próximas semanas para conocer su realimentación”.
En el país, los márgenes de intermediación en algunos productos, como la cebolla, la papa y el tomate, pueden oscilar entre el 47% y 259% entre el precio pagado al productor y el precio que paga el consumidor en los supermercados, según un reciente boletín de precios semanales, emitido por el Servicio de Información de Mercados (SIM) del Consejo Nacional de Producción (CNP).
En noviembre de 2020, el MEIC elaboró el estudio Análisis de la formación de precios en productos agrícolas: el caso de la papa y cebolla, el que concluyó que los procesos de comercialización de la papa y cebolla son muy complejos con la participación de gran cantidad de agentes comercializadores, lo que provoca ineficiencias en su funcionamiento.
“Este fenómeno genera que a lo largo de la cadena se presenten márgenes en promedio de 151,7% en el caso de la papa y 145,4% en cebolla, lo cual podría representar una desproporción en los márgenes de comercialización y con ello una afectación al consumidor final”, refiere el informe.
La Nación consultó al MEIC sobre las acciones que realiza actualmente para revisar estos márgenes. La institución respondió que el CNP, en coordinación con el MEIC y el MAG, desde agosto de 2022, desarrollan un programa de divulgación para dar transparencia al mercado, publicando en sus redes sociales, información semanal a los consumidores sobre las diferencias de precios.
“De esa manera se le brinda información al consumidor para que este tome la mejor decisión que puede tomar: una decisión libre e informada”, agregó la entidad, para luego citar 12 productos, entre hortalizas y frutas, que se incluyen en la lista que refleja precios de las ferias del agricultor y supermercados.
“Además, conocemos de acciones que ha impulsado el MAG para promover una mayor competencia en el Cenada para el caso de los mercados de productos agrícolas”, aseguró la institución..
Sobre el caso específico de la papa, cebolla y tomate, cuyo proceso de comercialización fue presentado este sábado, en un reportaje de La Nación, el MEIC indicó que el CNP, Sepsa y PIMA Cenada, de forma conjunta, realizaron un análisis sobre estos temas y se encuentra en proceso de depuración y revisión.
El Programa Integral de Mercadeo Agropecuario (PIMA), elabora un boletín de precios diario en base a los resultados de las transacciones que se realizan en el Centro Nacional de Abastecimiento y Distribución de Alimentos (Cenada), mercado mayorista que es una referencia para la comercialización de productos agropecuarios.
Hoy por hoy, el precio del Cenada es la principal referencia en la cadena de comercialización de los productos, siendo utilizado por productores, intermediarios y supermercados.
Miguel Monterrey, director del Cenada aclaró que el boletín se elabora como una referencia para las transacciones en el mercado mayorista, pero es consciente que es el único indicador de precios que existe en el país.
Indicó que el sistema de información de mercados, además del registro de Cenada, debería contar con un boletín de precios a nivel de producción y del mercado minorista. “Somos la única luz que hay en referencias de precio”, comentó.
¿Cómo fijan precio los supermercados?
Los supermercados, tienen parte importante en este proceso de comercialización de hortalizas. Elmer Solís, coordinador del Área de Frutas y Verduras de Auto Mercado, indicó que los productos locales los compran en su totalidad a los agricultores de manera directa.
Con esa compra directa, Solís aseguró que eliminan la intermediación, que surge cuando personas dedicadas a comercializar van a las fincas de los agricultores a recoger los productos y lo llevan a los mercados mayoristas, debido a que muchos productores no cuentan con la pericia para vender al detalle.
Solís explicó que la compra directa al agricultor está basada en los precios de referencia del mercado mayorista. “Eliminamos ese margen de intermediación”, aseguró
Auto Mercado cuenta con un centro de distribución en Santo Domingo, Heredia, donde previo a un acuerdo de compra, el agricultor entrega la mercadería con los estándares de calidad pactados.
Sobre los precios al consumidor, indicó, sin detallar cifras, que se define con base en el precio del producto en el mercado en general, pero manteniendo la propuesta de calidad diferenciada que tiene la cadena. “Es un tema de reacción del mercado, el precio de costo y de venta no necesariamente caminan paralelos, se definen por dos métodos diferentes, uno por la oferta y demanda en el mercado mayorista y el otro por el mercado comercial”.
Solís refirió que debido a los estándares de calidad que demandan sus clientes, pagan un sobreprecio a los proveedores.
Por su parte, la cadena de supermercados Walmart, que incluye 14 tiendas Walmart, 37 Masxmenos, 58 Maxi Palí y 198 Palí, respondió por medio de su oficina de prensa que realiza el acopio de perecederos agrícolas en su Centro de Distribución (CEDI) de Coris en Cartago donde se reciben frutas, vegetales y granos de diferentes partes del país.
Walmart realiza las compras mediante acuerdos de adquisición de cosechas completas, proyecciones de siembras a futuro y cuentan con proveedores propios, a quienes les brindan soporte técnico y capacitaciones. “Se procura no comprar a intermediarios”, indicó la empresa.
Mediante el programa Tierra Fértil, que asesora a los agricultores en varios aspectos, Walmart Costa Rica, hasta mayo, compró a cerca de 302 productores agrícolas nacionales un total de $22,4 millones, el 85% son pymes, indicaron.
Los precios de compra a los productores nacionales se establecen tomando como referencia, los precios del Cenada y utilizan también el histórico de precios que tiene la compañía. Sobre la consulta de cómo se establece el precio al consumidor, la cadena no emitió respuesta.
Lucrecia Brenes, economista, especializada en temas comerciales, indica que los márgenes de intermediación dependen de la competencia que haya en los diferentes canales de comercialización y de todos los costos involucrados en el proceso.
Menciona que también lo determina, quien asume el riesgo de comercializar, porque tiene el elemento de enfrentar la pérdida del producto en dependencia del lugar donde lo venda. “La medicina natural para eliminar los altos márgenes de intermediación es la competencia”, concluyó.