La Sala Constitucional rechazó de plano el recurso de amparo que presentó el abogado Mauricio Brenes Loaiza, en enero del 2022, por la obligación de digitar el PIN (personal identification number) en los dátafonos de los comercios para autenticar las compras superiores a ¢30.000, con tarjetas bancarias. Así lo hizo este tribunal mediante el voto número 2022006488 de las 09:30 horas del 22 de marzo de 2022.
Según el Reglamento del Sistema de Tarjetas, publicado en el alcance 5 de La Gaceta, el 14 de enero del 2022, toda operación de pago con tarjetas mayores a ¢30.000 requiere la autenticación por parte del propio cliente, ya sea plasmando con su huella digital o digitando el PIN, en el datáfono del comercio en el que se realiza la compra.
La última fecha acordada es iniciar la actualización de los datáfonos que solicitan el PIN el 1°. de mayo próximo, y finalizar la actualización del 100% de los mismos en febrero del 2023. Los clientes también deben cambiar la tarjeta de crédito o débito, lo cual se hará de forma paulatina a medida que los plásticos venzan.
El abogado argumentó ante la Sala IV que la obligación afectaba la salud pública. “Apunta que en franco retroceso, y en detrimento de la salud pública, se obliga a los clientes a hacer contacto con un cuerpo que podría ser utilizado por gran cantidad de personas. Ese proceder, vulnera el derecho a la salud y a la vida”, indicó el abogado, según describe el voto.
En el voto, la Sala explica que la discusión es sobre una norma de carácter general y abstracta, por lo que, para ser admisible el recurso, debería de cumplirse con las condiciones establecidas en el artículo 30 inciso a) de la Ley de la Jurisdicción Constitucional, la cual establece el amparo contra disposiciones generales en alguno de dos supuestos: que se impugnen junto con actos de aplicación individual o cuando se trata de normas de aplicación automática.
“Para el Tribunal es claro que ninguno de tales supuestos se cumple en el caso en estudio, dado que no se reclama ningún acto de aplicación individual del citado reglamento y por otra parte, es claro que no se trata de disposiciones de aplicación automática en tanto que requieren actos concretos para lograr que produzcan efectos en el ámbito jurídico de los administrados, lo que no constan. Por lo anterior, el recurso resulta inadmisible”, explica el alto tribunal en el voto.
Consultado sobre la decisión de la Sala, Brenes indicó que lo que la Sala está argumentando es que no hay una lesión concreta a un ciudadano o una aplicación automática y es porque el reglamento todavía no se aplica.
“En otras palabras, es un poco prematura la acción, es lo que dice la Sala porque requeriría que haya algún afectado individualizado, una persona concreta que diga a mí me pasó esto y por lo tanto yo le pido a la Sala que diga si esto es un acto válido o no (...) No significa que el acuerdo de la Junta Directiva del Banco Central sea un acuerdo correcto, no está valorado por el fondo, lo que dice es que aún no se ha dado la lesión y por lo tanto no podemos entrar a valorarla”, opinó el abogado.
Será un proceso
De esta forma, la medida continúa su proceso y una vez que los datáfonos estén actualizados y las tarjetas tengan esa funcionalidad los clientes ya no tendrán que firmar váucher, sino que al realizar la transacción solo deben digitar el PIN, que es el mismo que utilizan con la tarjeta de débito o crédito cuando retiran efectivo del cajero.
Los consumidores no deben entregar el PIN a ninguna persona o comercio, sino que los comercios tienen la obligación de acercar el datáfono para que el dueño de la tarjeta digite el PIN.
El 21 de enero pasado, Rodrigo Cubero, presidente del BCCR, defendió la decisión de utilizar el PIN para los pagos con tarjetas en las compras mayores a ¢30.000.
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Cubero enfatizó en que la implementación del nuevo sistema se diseñó en conversación y coordinación con los bancos desde hace tres años y alegó que la medida responde a las mejores prácticas internacionales para la prevención de fraudes.
“La introducción del uso del PIN no es una decisión aislada del Banco Central. Es algo que se viene trabajando por varios años en conjunto con los bancos. Los bancos voluntariamente han introducido el PIN en las tarjetas de débito y crédito”, afirmó el presidente del emisor.