Los desarrolladores inmobiliarios adaptaron su oferta de viviendas para acercarse más al presupuesto y condiciones de los clientes.
Entre los ajustes efectuados se encuentra la reducción en los metros cuadrados (m²) de construcción de las casas lo cual les permitió bajar los precios y acercarse a la capacidad de pago de las personas.
Esta es una de las características principales de los proyectos que se promocionan destinados a familias de clase media en la Expoconstrucción y Vivienda 2019 que se inició este miércoles 13 de febrero, y se extenderá hasta el próximo 17 de febrero, en el Centro de Eventos Pedregal en Belén.
Las empresas inmobiliarias también optaron por construir proyectos en lugares menos convencionales o más hacia la periferia de la Gran Área Metropolitana (GAM), como La Guácima San Ramón en Alajuela, o en Alajuelita.
Javier Peñaranda, presidente de la organización de Expoconstrucción, comentó que durante año tendrán una actividad más inclusiva mediante el fomento del uso del bono de interés social.
Este es un subsidio estatal que establece exoneraciones en el proceso de compra de viviendas cuyo costo sea menos de ¢58 millones.
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“El sistema sirve para comprar, construir, ampliar la casa y remodelar. La persona solo debe consultas los requisitos en las entidades financieras y optar al beneficio“, destacó Peñaranda.
Con este sistema, por ejemplo, los procesos de formalización, avalúo, procesos legales, o parte de la cuota mensual pueden costearse con el bono.
Nuevas características
Minor Rodríguez, gerente general de la Fundación Promotora de Vivienda (Fuprovi), destacó que, durante este año, hay opciones de viviendas más adaptadas a las familias de ingresos medios, comparado con hace cinco o seis años.
“Antes los precios de las viviendas iban de $100.000 en adelante. Ahora hay opciones de casas desde los $65.000, es decir, ¢39 millones“, destacó Rodríguez.
El representante de Fuprovi indicó que la forma de adaptarse fue construir casas más compactas, de uno o dos cuartos, pues responden a la realidad del nuevo modelo de familia de uno o dos hijos.
Precisamente, ese tipo de proyectos son los que promueven las entidades financieras.
Marco Ulate, de Grupo Mutual, destacó que la entidad financia dos proyectos de apartamentos desde los 42 m² y hasta los 97 m², cuyo costo va desde los ¢46 millones hasta los ¢56 millones.
“Son construcciones de dos habitaciones, con dos parqueos, zonas verdes y piscina. El cliente puede optar por la opción de bono más crédito, para lo cual se pide un ingreso familiar de menos de ¢1,6 millones“, recalcó Ulate.
Alexis Barquero, de la inmobiliaria Poró Condominios, destacó que tiene un proyecto en San Rafael de Alajuela, en el cual la casa es de 68 m², con dos habitaciones por $90.000, es decir, poco más de ¢55 millones.
“Uno de los requisitos básicos es que la nota crediticia de la persona no esté manchada. En nuestro análisis, el núcleo familiar debe contar un ingreso líquido de ¢1 millón al mes, pero hay entidades financieras que financian a clientes con ingresos de hasta ¢800.000 netos“, recalcó Barquero.
El costo de una vivienda puede bajar, incluso, hasta los ¢22 millones, si se construye en lote propio.
Santiago Barrantes, de la empresa Arquihogar, que trabaja con el sistema de llave en mano, destacó que se adaptan a las condiciones de los clientes.
“Contamos con un paquete básico de una casa con dos cuartos, terraza y sala comedor denominada TecnoCasas. Esta incluye páneles solares y un sistema de uso eficiente de agua. El paquete básico es de $35.000“, destacó Barrantes.
Los costos de la empresa no incluyen los trámites de permisos de construcción, pero se pueden incluir en el paquete a solicitud del cliente, recalcó este representante.