El uso de las computadoras portátil es hoy más frecuente por el bajo precio de estos equipos -la competencia es dura entre los fabricantes- y la mayor necesidad de los usuarios de llevar a todos sitios la informática al hombro.
Sin embargo, la amplitud de modelos y precios dificultan la escogencia y con el inconveniente de ser una compra difícil: mejorar a futuro las capacidades del aparato es costoso y rara vez se da.
El procesador de la computadora es la parte más importante, pero recuerde que a mayor potencia en este componente habrá más consumo de batería y el aparato se calentará más.
Las compañías AMD e Intel hacen los procesadores habitualmente hallados en las portátiles.
En algunos casos las firmas optimizan la duración de la batería, mientras que otros se concentran en el rendimiento (velocidad y potencia).
Los procesadores móviles, destacados por la palabra "móvil" o simplemente "M", requieren menos potencia y generan menos calor que los procesadores diseñados para las PC de escritorio.
Otro componente fundamental para definir la compra es la memoria RAM instalada. Esta influye en la velocidad de respuesta de los programas de la computadora.
Si, por ejemplo, utiliza software para edición de fotos o video, instale al menos un gigabyte (GB) de memoria RAM para más comodidad.
En cambio, si lo utilizará para navegar, escribir textos, oír música, ver videos o para juegos electrónicos 512 megabytes estarán bien.
Disco duro. Otra consideración básica es el tamaño del disco duro, que define la capacidad para alojar archivos e instalar programas.
Evite aparatos con menos de 40 GB de disco duro. Es preferible que el tamaño oscile entre 60 y 80 GB pues la eventual acumulación de música, video y fotos tiende a empequeñecer el espacio a la vuelta de un par de años si el disco duro es muy pequeño.
Las unidades lectoras de discos actuales leen y graban discos en blanco y leen discos en formato DVD. Si puede, invierta en una que también grabe o queme DVD.
Esta característica resulta estratégica pues le permitirá respaldar archivos en menos cantidad de discos y facilita la liberación de espacio ocupado en el disco duro.
En cuanto al monitor, que tenga una resolución de 1024x768 píxeles o superior y, si es posible, unas 17 pulgadas de monitor para facilitar la vista del área de trabajo, y disminuir el cansancio de los ojos luego de utilizarla por mucho.