El Banco Central de Costa Rica (BCCR) prevé una moderación en el crecimiento del crédito en dólares en este 2024, luego de que el año pasado la cartera crediticia en moneda extranjera experimentara un fuerte aumento que cerró en doble dígito.
A diciembre del año pasado, el saldo del crédito en dólares otorgado por el sistema financiero al sector privado (empresas y familias) fue de $14.256 millones, con un crecimiento interanual del 11,1%, respecto a los $12.836 millones en el mismo periodo de 2022, según el Banco Central de Costa Rica (BCCR).
El aumento en la demanda de créditos en la divisa en 2023 sucedió luego de varios años en los cuales el saldo de préstamos en dólares mantuvo variaciones negativas. Fue en octubre de 2022 cuando la demanda empezó a reactivarse; desde entonces, el incremento ha sido constante.
Róger Madrigal, presidente del Banco Central, explicó durante la presentación del más reciente Informe de Política Monetaria al final de enero pasado que hay señales mixtas en cuanto a la dolarización en el país, pues este fenómeno ha sido más visible en el crédito, pero no tanto en otros indicadores como la liquidez.
Para este año, la previsión del ente emisor es que el crédito en dólares modere su crecimiento al 5% y que la tendencia a la baja continúe para 2025, cuando proyectan un aumento de la cartera crediticia en moneda extranjera del 3%, según consta en el último Informe de Política Monetaria.
En respuesta a La Nación, Madrigal señaló que la moderación en el crecimiento del crédito en dólares que proyecta el BCCR para 2024 responde a varios factores. Uno de ellos es el efecto de recuperación, pues en 2023 se creció a tasas muy altas, lo que incide en la operación comparativa para este año.
Otro aspecto que señaló el jerarca del ente emisor son las regulaciones bancarias, que exigen un análisis más exhaustivo por parte de las entidades financieras cuando las personas interesadas en solicitar créditos en la divisa no tienen cobertura natural o financiera de sus ingresos en moneda extranjera.
“En la medida en que esa regulación se aplique con más fuerza, (el crédito) va a tender naturalmente a moderarse. Hay dos (factores). También tenemos un mecanismo natural de moderación, que son las cifras con altos crecimientos que luego se moderan”, manifestó Madrigal.
Pese al aumento en los préstamos en moneda extranjera durante el 2023, es relevante destacar que la cartera colonizada en dólares experimentó una caída respecto al año previo debido a la apreciación del colón.
Como consecuencia del diferencial cambiario, el saldo colonizado de la cartera de crédito en dólares se redujo de ¢7.727.470 millones en 2022 hasta ¢7.483.195 millones en el 2023, es decir, un descenso de ¢244.275 millones.
De hecho, La Nación publicó, la semana anterior, que la cotización de la moneda extranjera afectó las ganancias de las entidaes bancarias y generó un efecto en la valoración de los activos financieros y de la cartera crediticia en esa moneda, aunque las instituciones recalcaron que es un efecto contable, principalmente.
Entidades financieras como el Banco de Costa Rica (BCR), el Banco Nacional y Scotiabank coincidieron con la lectura hecha por el Banco Central en relación con el comportamiento del crédito en moneda extranjera para este 2024.
En el BCR indicaron que siguen viendo mayor dinamismo en moneda extranjera dadas las condiciones de tipo de cambio vigentes, aunque prevén un crecimiento similar al del BCCR, considerando este efecto de dinamismo que hubo en 2023.
En tanto, en el Banco Nacional coincidieron con el BCCR en que habrá un menor crecimiento del crédito en dólares. Entre las razones que destacaron se encuentra la expectativa que durante 2024 el tipo de cambio presente poca volatilidad o que incluso el colón tenga una pequeña depreciación, lo que disminuirá el incentivo para tomar créditos en esta moneda.
Amedeo Gaggion, director regional de Tesorería de Scotiabank, afirmó que es de esperar una moderación en las tasas de incremento para 2024 pues se compara con una base relativamente elevada tras el fuerte crecimiento del crédito en dolares en 2023. Añadió que el desempeño podría variar según factores como el tipo de cambio o las tasas de interés.
De acuerdo con el BCCR, el crédito total al sector privado creció 6,7% en 2023, con un mayor impulso de las operaciones en moneda extranjera. Entre los elementos que favorecieron esa dinámica en los préstamos en dólares se encuentra el encarecimiento de los créditos en colones.
Sin embargo, la previsión para este año es que el aumento del crédito sea impulsado, mayormente, por colocaciones en moneda nacional. Según Madrigal, una eventual reducción de las tasas podría impulsar los préstamos en colones y la moderación de las operaciones en dólares.
Papel de bancos
Laura Moreno, vicepresidenta de Relaciones Corporativas del BAC, explicó que dentro de los análisis que hacen para originar un crédito en dólares a un no generador de la divisa, está la aplicación de modelos de estrés.
Moreno añadió que en esos estudios se considera la afectación no solo del tipo de cambio, sino también de la tasa de interés, con lo cual valoran distintos escenarios que pueden afectar el servicio de la deuda previo al otorgamiento del préstamo.
En tanto, el Banco Nacional destacó que para estos casos en que los deudores no generan ingresos en la divisa se requiere de un análisis más riguroso en la medición de la capacidad de pago de esta obligación financiera.
En el Banco Nacional también realizan la aplicación de escenarios de sensibilización de tipo de cambio, con los cuales pueden determinar que el ingreso del cliente soporta aumentos en la cuota de su crédito derivado de fluctuaciones en el precio del dólar.
En el BCR indicaron que hacen un análisis y valoración de la solicitud de crédito, dentro del cual se toma como consideración que haya un calce de los ingresos y gastos en la misma moneda, con el fin de cuidar la estabilidad financiera del cliente.
Por otro lado, en relación con las operaciones en la divisa, el Banco Popular se enfoca principalmente en clientes cuyos ingresos se generan en dólares, por lo que su cartera de crédito no ha presentado un crecimiento tan marcado.
Riesgos
Uno de los señalamientos que ha hecho la autoridad monetaria acerca del aumento acelerado de los préstamos en moneda extranjera es que se aumenta la exposición del sistema financiero al riesgo cambiario.
“Eventualmente, si no se están siguiendo las reglas de que haya una correspondencia o cobertura de la moneda de endeudamiento con la de ingresos, eso puede tener riesgos para el sistema financiero”, dijo Madrigal, durante la conferencia de presentación del Informe de Política Monetaria.
A principios de enero, Rocío Aguilar, jerarca de la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef), también reconoció que el aumento de los préstamos en moneda extranjera representa un riesgo para el sistema financiero.
De acuerdo con los datos de la Sugef, al 31 de enero de 2024, de la cartera total de créditos directos en moneda extranjera, un 60% de los deudores están expuestos al riesgo cambiario, mientras que el otro 40% sí está cubierto.
Según Madrigal, el mercado de derivados o coberturas cambiarias en Costa Rica está desarrollado y ya mueve varios millones de dólares. Sin embargo, el presidente del BCCR reconoció que este instrumento requiere de cierto nivel de conocimiento y no está tan arraigado en la cultura financiera.
El jerarca añadió que no debe verse como un instrumento “para ganarle al mercado”, sino más bien como un seguro para las operaciones en moneda extranjera. Los derivados permiten a las empresas y personas establecer un valor futuro del dólar, mediante el cual se reduce la incertidumbre producida por cambios en el precio.
De los cuatro bancos considerados sistémicos en Costa Rica —Banco Nacional, BCR, Banco Popular y BAC—, solamente dos de ellos ofrecen el servicio de derivados cambiarios. En el Banco Nacional, el servicio es para personas físicas y jurídicas, mientras que en el BAC está dirigido a las empresas.