El Banco Central de Costa Rica acordó mantener la tasa de política monetaria (TPM), en 0,75% anual, y reafirmó su postura en favor de los intereses bajos con el objetivo de estimular el crecimiento de económico en los próximos meses.
La decisión fue anunciada por la Junta Directiva del ente emisor, este miércoles 27 de enero, luego de culminar la primera reunión de política monetaria del 2021.
La tasa de política monetaria es la que el Banco Central considera coherente con el costo de la liquidez en un momento dado y, generalmente, tiene impacto en el resto de tasas del sistema financiero.
Desde mediados de junio del 2020 este indicador tocó un piso de 0,75%, nivel prácticamente inédito en los años recientes; y este miércoles confirmó que esta será la postura en tanto la inflación siga tan baja.
Aunque la institución destacó que las proyecciones auguran la recuperación de la economía mundial en los dos próximos años, y que en Costa Rica también se observa un proceso gradual de mejoría desde mediados del 2020, recordó que la covid-19 todavía plantea mucha incertidumbre.
En Costa Rica –argumentó el Banco–, la brecha del producto sigue siendo fuertemente negativa (es decir, existe capacidad ociosa en la economía) y la tasa de desempleo permanece muy alta aunque decreciente, según los datos de los últimos dos trimestres.
Lo anterior, combinado con una baja inflación mundial y expectativas de inflación también bajas, implica la presencia de fuertes presiones desinflacionarias, destacó el emisor.
“En línea con ello, los modelos de pronóstico del Banco Central indican que, en el bienio 2021-2022, la inflación (de Costa Rica) se mantendría por debajo del límite inferior del rango de tolerancia para la inflación meta (3,0% ± 1 punto porcentual).
La autoridad económica sostiene que esta coyuntura le abre espacio para mantener una postura de política monetaria expansiva y contracíclica, sin comprometer el objetivo de la inflación.
Estímulos en la oferta monetaria
El Banco Central recordó que durante los últimos 22 meses tomó una serie de decisiones que resultaron en una reducción de las tasas de interés, para préstamos y ahorros, en el sistema financieron nacional.
Entre ellas, citó el recorte de 4,5 puntos a la TPM; la reducción de la tasa de encaje mínimo legal en la banca y la de reserva de liquidez en colones; inyectó liquidez en el mercado de dinero, y en el secundario de deuda pública, además de abrir una facilidad especial de crédito en colones.
“...la Junta Directiva estima conveniente mantener la postura expansiva y contracíclica de la política monetaria, para que la transmisión de las medidas ya adoptadas genere los efectos deseados sobre la actividad económica y el empleo”, se destaca en el comunicado.
Pero además de la decisión de este miércoles, el Banco Central comunicó que a futuro mantendrá su postura contracíclica hasta tanto la inflación se proyecte por debajo de su valor meta del 3%, lo cual, como dijo, se espera ocurra por al menos dos años.
La Junta tendrá su próxima reunión de política monetaria el 17 de marzo.