El proceso de resolución de Coopeservidores implica varias etapas en las cuales se dividirá la institución en dos, para separar lo valioso de lo deteriorado, creando los denominados “banco bueno” y “banco malo”.
La separación se hace con el objetivo de que los activos de calidad de la institución, también conocida como CS Ahorro y Crédito, sean absorbidos por la única entidad que presentó una oferta para negociar el traspaso con Marco Hernández, administrador de la resolución de la cooperativa.
El Banco Popular (BP) fue la institución financiera que confirmó su interés y entregó una oferta formal. ¿Pero cuáles son esos activos valiosos que interesan a la institución pública?
Hernández desglosó, durante una entrevista con La Nación, el “banco bueno” de Coopeservidores, que incluye desde préstamos, propiedades e inversiones en títulos valores, hasta propiedades y equipo mobiliario.
El resolutor confirmó que el paquete de activos identificado como valioso tiene un valor que ronda más de ¢500.000 millones, aunque la entidad interesada no está obligada a escoger todo, pues dependerá de sus objetivos.
Sin embargo, recalcó que si la institución decide absorber, por ejemplo, ¢190.000 millones, deberá llevarse el mismo monto en pasivos de Coopeservidores –principalmente ahorros y depósitos– dado que es la forma de garantizar a los clientes de la cooperativa la devolución de su dinero.
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”La idea es que la entidad solvente se lleve los activos correspondientes para pagar estos pasivos; ese es el chiste del ‘banco bueno’. No se puede llevar menos para poder pagar más, porque sino entonces la entidad asume una pérdida. La idea es que el ‘banco bueno’ vaya equilibrado, tanto los activos como los pasivos tienen que ser por el mismo monto”, explicó Hernández.
El 21 de junio, el Consejo Nacional de Supervisión del Sistema Financiero (Conassif) aprobó el informe de intervención de Coopeservidores, el cual determinó que la entidad es inviable, no cumple con los objetivos de solvencia, y no se prevé que en el futuro próximo cuente con la capacidad para hacerlo. Por lo tanto, se iniciará un proceso de resolución que derivará en el cierre de la cooperativa.
Activos sanos
Una cartera de crédito con un saldo de ¢395.776 millones es el principal componente del activo puesto a disposición del único banco que mostró interés. Hernández explicó que estos préstamos son, en su mayoría, operaciones de consumo a largo plazo.
El otro elemento relevante dentro de los activos son títulos valores por ¢120.389 millones, los cuales, en su mayoría, están invertidos en bonos de deuda del Gobierno, confirmó el resolutor.
Además, en efectivo cuenta con ¢32.439 millones. Por último, en propiedades, mobiliario y equipo, la cooperativa tiene activos valorados en ¢13.059 millones, según el Informe de Interventoría de Coopeservidores.
‘Es un buen negocio’
El exbanquero Carlos Fernández comentó que la absorción del “banco bueno” de Coopeservidores tiene bastantes ventajas para la entidad que oficialice el proceso. “Es un buen negocio porque, desde el punto de vista de activos y cartera, el banco crece. También tiene un aumento en depósitos y le da un empuje en el número de clientes”, consideró.
Fernández añadió que también tendría la posibilidad de mejorar la rentabilidad. “La banca que busque crecer en consumo con clientes y, si es solo cartera buena, puede mejorar el indicador de morosidad”, recalcó.
Por su parte, el administrador del proceso de resolución de la cooperativa explicó que la entidad interesada en llevarse todo el paquete sano de activos y pasivos debe tener una suficiencia patrimonial del 14%, pues la absorción implicará al menos 1,5 puntos porcentuales de suficiencia.
Este indicador es vital al evaluar la solidez del capital de las entidades, revelando su capacidad para hacer frente a los riesgos inherentes a su actividad y midiendo su solvencia y estabilidad financiera. “La entidad interesada debe andar por encima del 14% porque la normativa dicta que el 14% es el nivel de normalidad, después se degrada, si baja la entidad debe presentar un plan remedial”, subrayó Marco Hernández.
El Banco Popular reportó, a marzo pasado, una suficiencia patrimonial del 21,73%, según Sugef. El encargado de la resolución agregó que la entidad que absorba los activos y pasivos debe de cumplir con la regulación normal, por lo cual la institución solvente debe valorarlo.