Los regímenes de pensiones costarricenses mantienen una fuerte concentración de los recursos invertidos en el sector público, principalmente en el Gobierno Central.
Hasta abril pasado, los fondos básicos de pensiones tenían el 88,7% de los ¢5,1 billones que administran invertidos en instituciones públicas, según datos de la Superintendencia de Pensiones (Supén).
Estos regímenes son los del Magisterio Nacional, el Poder Judicial y el de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM).
Las operadoras complementarias de pensiones administran ¢5,9 billones de los cuales el 69%, también están invertidos en instrumentos del Ministerio de Hacienda y el Banco Central. En el caso del dinero del Fondo de Capitalización Laboral (FCL), la concentración es del 60%.
Los datos fueron divulgados este 6 de junio, durante la charla Déficit fiscal: impacto y efectos en los regímenes de pensiones, organizada por la Junta de Pensiones del Magisterio Nacional (Jupema).
Jupema propuso, en dicho foro, un estímulo a las inversiones de los regímenes de jubilación de Costa Rica en proyectos de obra pública.
Róger Porras, director ejecutivo de Jupema, enfatizó que urge buscar esquemas de diversificación de los recursos de las pensiones de los trabajadores del país, máximo con un panorama de mayores dificultades económicas del Gobierno Central.
"La posibilidad de invertir en infraestructura es fundamental, pues contribuye al desarrollo nacional y pueden generar rentabilidad a los fondos de pensiones", recalcó Porras.
Jupema actualmente administra ¢1,9 billones del Régimen de Capitalización Colectiva de maestros y profesores.
El director de la Junta señaló que en otros países se invierten recursos en fideicomisos de obra tanto públicas como privadas; pero en Costa Rica aún es limitado.
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Actualmente, la Junta solo puede invertir en instrumentos inscritos en la Bolsa Nacional de Valores.
Porras destacó que promueven una reforma legal para permitir a Jupema destinar recursos a obras como el fideicomiso de la carretera a San Ramón.
Para Jaime Barrantes, gerente de Pensiones de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), todavía existe carencia de proyectos de infraestructura pública para destinar recursos de los fondos de jubilación.
La Caja administra el IVM cuyo reserva de dinero asciende a ¢2,3 billones. La mayoría del dinero está invertido en Hacienda.
Barrantes enfatizó que los regímenes enfrentan el problema de la poca oferta de instrumentos capaces recibir montos altos de dinero.
Mencionó, por ejemplo, que las entidades financieras privadas ofrecen títulos que pueden absorber pocos recursos de los disponibles por los fondos.
Esa situación genera que se termine invirtiendo en Hacienda y Banco Central.
La Caja aprobó, en abril del 2016, destinar hasta el 10% de sus recursos (¢230.000 millones) para obra pública y el 1% (¢23.000 millones) en el extranjeros.
Por ahora, no se ha destinado dinero a ninguna de las dos opciones, según indicó Barrantes.
En el primer caso, por falta de oferta en el mercado local, y en el exterior porque está pendiente la aprobación del reglamento que regule la figura.