Los fuertes pagos de deuda que deberá hacer el Gobierno el próximo año lo obligan a estrujar otros gastos para evitar caer en nuevas deudas y que la situación se haga insostenible.
El Gobierno entregó, este 1°. de setiembre, un plan de gasto para el 2021 por ¢11,4 millones de millones, el cual aumenta en un 4,5% respecto al presupuesto inicial del 2020 ajustado para incluir los órganos desconcentrados para hacerlo comparable.
LEA MÁS: Presupuestos de 61 órganos desconcentrados serán discutidos en Congreso, por primera vez
Lo que hace crecer el plan de gasto son las amortizaciones, o pagos de deudas de años anteriores, las cuales suman ¢2,7 millones de millones para el 2021. Eso significa un 33% más respecto al plan de gasto inicial del 2020. En tanto, para el pago de intereses se destinan ¢2,1 millones de millones; un 8% más.
“Esto significa que para este periodo la deuda pública le costará al país más de ¢13.000 millones por día”, explica el Ministerio de Hacienda en un folleto.
Si se excluye del presupuesto la amortización y los intereses de la deuda, queda el gasto primario, que son aquellos sobre los cuales el Gobierno tiene algún control, explicó el viceministro de Hacienda, Isaac Castro.
Ese gasto primario se redujo en 4,9% al comparar los presupuestos iniciales, un monto de ¢341.937 millones.
“Este gasto primario, que está disminuyendo prácticamente un 5%, es importantísimo en virtud de que evidencia ese esfuerzo de control de gasto que está haciendo el Gobierno”, dijo el ministro de Hacienda, Elian Villegas al entregar el plan de gastos en el Congreso.
El proyecto comenzará a tramitarse este miércoles en la Comisión de Asuntos Hacendarios.
La Constitución Política dicta que el Presupuesto Nacional debe estar totalmente aprobado, en el Congreso, para el 30 de noviembre.
¿Cómo se redujo el gasto primario?
Para poder reducir el gasto primario el Ministerio de Hacienda, encargado de elaborar el presupuesto, estripó tanto el gasto corriente (incluye remuneraciones y transferencias corrientes) como el de capital (incluye compra de terrenos, edificios, maquinaria, equipo y transferencias para que otras entidades realicen obras).
El gasto corriente aumenta un 0,8% al comparar los presupuestos iniciales lo cual está por debajo del 4,13% de aumento que arrojó la regla fiscal, por lo tanto se cumple con la regla.
LEA MÁS: Regla fiscal se aplicará con excepciones en el presupuesto del 2021
Para lograr ese crecimiento, el pago de remuneraciones, que incluye remuneraciones básicas, incentivos salariales, salario escolar y contribuciones patronales, entre otros, crece apenas 0,8%.
¿Cómo se conseguirá ese objetivo? No se van a realizar aumentos salariales a ninguna entidad de este presupuesto que incluye a los poderes del Estado y a los órganos desconcentrados, dijo el ministro.
Además, hay una reducción neta en el número de plazas.
El proyecto de presupuesto del 2021 contempla la eliminación de 2.317 plazas (1.947 de ministerios y 370 de órganos desconcentrados) respecto a la relación de puestos 2020; además, se crearon 2.066 nuevas plazas ubicadas en el MEP (2.000), Poder Judicial (63) y Ministerio de Economía (3), lo que implica una reducción neta de 251 plazas.
“Con la implementación de la Ley 9524, 11.630 plazas correspondientes a los órganos desconcentrados, pasan a formar parte de la planilla del gobierno, sin que esto signifique que se hayan creado, es decir, no son plazas nuevas”, se detalla en el folleto explicativo.
Además, las transferencias corrientes, que son giros que se hacen a otras entidades para gastos corrientes como salarios disminuyen en 2,8% al comparar los presupuestos iniciales del 2020 y 2021.
En cuanto al gasto de capital se recorta en un 30,2%, una reducción de ¢238.000 millones al comparar los presupuestos iniciales de cada periodo.
El recorte se nota también al utilizar la clasificación institucional, en la cual, de los 22 ministerios, a 13 se les disminuye el presupuesto en el 2021 respecto al presupuesto autorizado para el 2020 y a cuatro se les autoriza un incremento menor al 2%.
Deuda llegará a 77% de la producción
Pese a estos esfuerzos, en el 2021 el Ministerio de Hacienda proyecta un déficit del Gobierno Central equivalente a 8,7% de la producción interna, una deuda que alcanzará el 77,46% de la producción y un gasto por intereses de 5,58% de la producción.
“El presupuesto general de la República para 2022 -pese a que muestra un esfuerzo de contención de gastos primarios- refleja la compleja situación de las finanzas gubernamentales: no sólo un elevado déficit sino un alto endeudamiento producto de muchos años de evitar el ajuste”, expresó el economista José Luis Arce.
“Una dinámica de la deuda perversa –combinación de bajo crecimiento económico y altos costos de financiamiento por el deterioro en la percepción de riesgo– hacen que el pago por intereses crezca desmedidamente afectando la sostenibilidad e incrementando los requerimientos de financiamiento de forma adicional”, añadió.
Con estas proyecciones, el ministro señaló que es necesario balancear el costo de la deuda interna versus el de deuda externa y que el principal reto es racionalizar el costo de la deuda interna.
“Tal y como lo hemos venido reiterando, la urgencia de sustituir deuda cara por deuda barata se hace cada vez más inminente.
“La estrategia de acceder a créditos de organismos multilaterales ha rendido frutos, pues a pesar de un mayor saldo de deuda externa, el monto presupuestado de intereses para atender esta deuda disminuye en 5,4% para el próximo año, respecto al presupuesto actual 2020″, indicó Elian Villegas.
Para el exviceministro de gasto, José Francisco Pacheco, este es un presupuesto que ni va a colaborar en el tema de reactivación y tampoco resuelve los problemas fiscales justamente por ese juego donde la deuda nos está asfixiando.
“Estamos en el peor escenario fiscal, ni es un instrumento desarrollista, así lo veo yo, ni la política que se sigue es para decir que las finanzas públicas están mejorando, no es que el Gobierno quiera o no quiera, es la realidad”, señaló Pacheco.
En la Asamblea Legislativa, el presidente Eduardo Cruickshank, comentó que muchas son las necesidades y poco el dinero, por lo que habrá que priorizar lo que realmente urge y dejar para futuros presupuestos las necesidades que puedan posponerse.
LEA MÁS: Eduardo Cruickshank promete análisis con lupa del Presupuesto 2021 para frenar gastos superfluos
Añadió que el trabajo de la Comisión de Asuntos Hacendarios del Congreso será minucioso, de lupa, para que no se vayan gastos superfluos o que no sean indispensables en este momento.