Las tres propuestas de reforma de la Caja al régimen de Invalidez, Vejez y Muerte (IVM) implicarán un cambio en las condiciones de jubilación de la mayoría de los cotizantes al fondo de pensiones.
Sin embargo, habrá un grupo reducido de trabajadores, cerca del 2%, que podrán retirarse bajo las reglas actuales de jubilación.
Jaime Barrantes, gerente de Pensiones de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), explicó que los tres planes de cambios al IVM tienen diferentes gradualidades de aplicación de las nuevas reglas.
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Por lo tanto, dependiendo de la que escoja la Junta Directiva de la Caja la cantidad de personas en mantener los actuales derechos de retiro puede modificarse.
La CCSS propuso elevar el aporte al IVM de 10,66% actual hasta 15,16%; unificar el monto de la jubilación para que sea equivalente al 45% del salario para todos los nuevos pensionados, mientras que en la actualidad es del 52%.
También modificar el retiro anticipado para elevar la edad y cantidad de cuotas actuales, o eliminar este beneficio del todo.
– ¿A la mayoría de los trabajadores se le modificarán los requisitos de jubilación y solo un grupo reducido mantienen derecho?
– Así es, lo que se trata es de lograr un equilibrio entre un transitorio largo posible, pero respetando el impacto de la sostenibilidad que pretendemos. Si se hace demasiado larga la transitoriedad se pierde el efecto.
“Lo que se debe respetar son los 18 meses y está planteado así en cada escenarios. Se plantea ampliar en algunos casos, pero sin perder el objetivo de dar sostenibilidad al 2050“.
– ¿La gradualidad para aplicar las nuevas reglas de jubilación pueden afectar el objetivo de fortalecer el IVM?
– En los tres planes propuestos hay una medida transitoria para la aplicación de los cambios. Dependiendo de la propuesta aprobada así será el transitorio.
“Por ejemplo, en el Plan 1 hay una transitoriedad que la Junta solicitó para que los cambios sean graduales (entre 2023 y 2027).
“En el Plan 2 hay un tema de solo aplicar los 18 meses, porque solo tiene un ajuste de dos años a la pensión anticipada. En el Plan 3, que elimina la pensión anticipada para los hombres y aumenta la edad de retiro a las mujeres en tres años, la propuesta sería que no se apliquen (las nuevas reglas de jubilación) a personas de 57 años en adelante.
Estos transitorios están calculados de forma tal para que no se pierda el objetivo de impactar la sostenibilidad del régimen en al menos hasta el 2050”.
– ¿En esta reforma se mantiene el plazo de 18 meses para que, una vez pasado ese periodo, se apliquen las nuevas reglas de jubilación?
– Los 18 meses establecidos por la Sala IV son el mínimo a cumplir. Pero en una de las propuestas se prevé aumentarlo en seis meses adicionales para completar dos años completos, y arrancar en el 2023.
“La transitoriedad se mezcla con ajustes en otros parámetros. En el Plan 1 es solo la edad. En el Plan 2 hay menos edad y en el Plan 3 hay un mayor impacto de edad para los hombres”.
– ¿Una persona puede perder los actuales derechos de jubilación solo si le falta una cuota o si quedó a dos mes de cumplir la edad de retiro, es así de estricto?
– Por lo general, estas reformas tienen una línea frontera, donde después de ese límite no se podría incluir (bajo los actuales requisitos). Por eso, se trata de hacer un cambio gradual al IVM y no radical.
– ¿Si se decide ampliar el periodo para conservar los derechos de jubilación será por decisión de la Directiva de la Caja?
– En general es lo común en estos planes que haya transitoriedad, sobro todo a las personas que están cerca de tener el derecho. En la reforma del 2005 hubo transitorios más amplios. A las personas de más de 55 años se les respetó el derecho.
”Quienes tenían entre 45 años y 54 años se les aplicó una transitoriedad. Y la reforma completa fue a quienes tenían menos de 45 años”.