Marco Hernández, interventor de Coopeservidores, se encargará a partir de este viernes 21 de junio del proceso de resolución de la entidad financiera, declarada como inviable y que será cerrada. Él tiene la potestad para negociar, de forma prioritaria, que otra entidad financiera absorba los activos y pasivos de buena calidad.
Reconoció que solo unos pocos bancos tienen la capacidad de absorber el denominado “banco bueno”. Ninguna cooperativa tiene “el músculo” para hacerlo de manera integral. A continuación, un extracto de la entrevista con La Nación.
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― El “banco bueno” que se crea en la resolución de Coopeservidores, ¿de qué estará constituido?
― Eso va a depender mucho de la negociación que hagamos con la entidad solvente. Hoy le puedo decir un número, pero al final lo que va a resultar es otra cosa completamente diferente, dependiendo de la negociación que se haga con una entidad solvente, porque la entidad solvente va a tener la libertad para decidir cuáles se va a llevar.
― ¿Cómo será ese proceso?
― Se deberá hacer una debida diligencia (de negociación). Aquí la premisa es que el “banco bueno” debe llevarse los pasivos de manera completa. Entonces, contra esos pasivos, lo que ofrecemos es que se respaldarán con estos activos. ¿Cuáles? Los que consideramos valiosos como la cartera crediticia. La selección de la entidad dependerá mucho de su apetito de riesgo.
“Coopeservidores tiene cartera de muy largo plazo, y los apetitos de riesgo de las entidades no comulgan con eso, sobre todo en carteras de consumo. Entonces, ya ahí hay una condición donde hay un castigo de parte de estas entidades. Hay muchos créditos atractivos, pero hay un porcentaje importante que podría ser que no.”
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― ¿Lo que hará la entidad solvente es absorber pasivos y activos?
― La idea es que con los activos se pague el pasivo (depósitos y ahorros). Ahora bien, van a subir activos líquidos y activos menos líquidos contra un pasivo que va a tener un recorte, en pasivos no garantizados, para que el balance sea atractivo. Los pasivos se irán pagando conforme se vayan venciendo en el contrato original.
“Lógicamente, aquellos que ya están vencidos o están a la vista serán los que se paguen primero y luego se seguirá pagando a todos los que vayan venciendo.”
― ¿Si se da el traslado del “banco bueno” a la entidad solvente, esta deberá responder por los depósitos, incluso si se liquidan de manera anticipada?
― Sí, porque el dinero ya no estaría inmovilizado (como en la intervención). Por eso, la entidad estaría notificando a los ahorrantes e inversionistas para que reclamen sus recursos. Será discreción del cliente si retira el dinero o lo deja.
― ¿Su objetivo en el proceso será transferir todo el paquete o segmentarlo?
― Cuando se empieza a dividir, le va quedando lo menos atractivo; entonces, es mucho más difícil. La idea es vender el paquete porque es mucho más atractivo y más potable para efectos de hacer una transacción beneficiosa para los acreedores y los inversionistas.
“Aquí, la premisa es que todos los pasivos pasen a la entidad solvente. Empezar a pasar a una entidad y luego a otra, y escoger los activos que respaldan, ya es más difícil y complejo. No es recomendable.”
― La mayoría de entidades del sistema financiero son solventes, pero no todas pueden absorber algo tan grande. ¿Son pocos los posibles oferentes?
― Esta transacción implica, para una entidad, puntos de suficiencia patrimonial. Entonces, cuando hablamos de una entidad solvente, no hablamos de la entidad más grande, porque puede ser que no tenga el músculo para llevarse todo, pues le puede representar puntos de suficiencia y más bien podemos, al final, generar un problema. No se trata de desvestir un santo para vestir otro.
“Aquí se trata de una entidad con la suficiencia patrimonial necesaria y, en realidad, son muy pocas.”
― ¿Usted será quién hará la invitación a las entidades?
― Yo haré la invitación, pero cualquiera puede acercarse.
― ¿Pueden entrar cooperativas a la negociación del “banco bueno”?
― Sí lo pueden hacer, pero la transacción es muy grande para que se la lleve una cooperativa; ninguna la aguantaría. Aquí estamos hablando de bancos.
― El “banco malo” que va a un fideicomiso, ¿quién lo administrará?
― Se dará a quien ofrezca las mejores condiciones para administrarlo. El fideicomiso será por un año, será un patrimonio autónomo y debe administrarlo también una entidad financiera. Aquí las cooperativas tampoco pueden participar, porque no pueden administrar fideicomisos por ley.
― ¿Las cooperativas quedan fuera totalmente?
― Pueden participar en comprar cartera por segmento, la que no se lleve la entidad solvente.
― Si no hay acuerdo para transferir el “banco bueno”, ¿entra el fondo de garantía de depósitos?
― Si el proceso de resolución no va, lo que se hace es que toda la entidad se iría a un proceso concursal, con todos sus activos y pasivos; pero antes de que se envíe a la vía concursal, se ordena al fondo de garantía de depósitos pagar la cobertura, hasta los ¢6 millones, para 162.000 depositantes.