La tasa básica pasiva, un promedio de las tasas de interés pagadas por los ahorros, aumentará a partir de este jueves. El indicador pasará de 6,44% a 6,52%, según el último cálculo hecho por el Banco Central de Costa Rica (BCCR), que regirá durante los siguientes siete días.
Esto implica un incremento en las cuotas para quienes tienen operaciones de crédito ligadas a este indicador. Según datos de la Superintendencia General de Entidades Financieras (Sugef) hasta agosto había 1.322.407 operaciones de créditos en moneda nacional con tasa variable o semifija, de las cuales 700.854 estaban ligadas a la tasa básica.
LEA MÁS: Monto negociado en la Bolsa Nacional de Valores se redujo 28% en medio de la incertidumbre del 2022
Esas 700.854 operaciones de crédito del sistema financiero nacional ligadas a esta tasa, en agosto pasado, representan 53% de las operaciones a tasa variable o semifija, en moneda nacional, de acuerdo con las estadísticas suministradas por la superintendenta general de Entidades Financieras, Rocío Aguilar, el 12 de octubre anterior.
Por otro lado, la subida en la tasa básica pasiva representa un beneficio para los ahorrantes, debido a que refleja que reciben mejores rendimientos por su dinero en el sistema financiero. Este indicador, que se calcula semanalmente, se duplicó en el último año, al pasar de 3,00% el 26 de enero del 2022 a 6,52% a partir del jueves.
Carlos Fernández, exgerente del Banco de Costa Rica, explicó que estos aumentos en la tasa básica pasiva de las últimas semanas han sido un poco más pequeños que los anteriores, y que responden, principalmente, al ajuste de algunas tasas de interés de intermediarios financieros.
Esta tasa es un promedio ponderado de las tasas de interés brutas (sin excluir el impuesto sobre la renta) de la captación que las entidades financieras realizan en el mercado nacional. Para obtener el resultado semanal, el Banco Central saca un promedio ponderado por el monto de la captación de las últimas cuatro semanas.
La tasa ha incrementado en el último año como consecuencia de los aumentos en la tasa de política monetaria del Banco Central, pues pasó de 0,75%, en diciembre del 2021, a 9,00% para el mismo mes del 2022; aunque se mantuvo en el mismo nivel para enero.
Esa subida en la tasa de política monetaria provoca una presión en el resto de tasas del mercado, con el propósito de reducir el consumo y así bajar la presión interna sobre los precios y evitar el incremento sostenido de la inflación a largo plazo.
¿Cuándo podría bajar?
El incremento en la tasa básica pasiva preocupa sobre todo a los deudores, quienes en el último año han experimentado un aumento sostenido de las cuotas de sus créditos. En relación con ese tema, la Asociación Bancaria Costarricense (ABC) informó, a principios de enero, que los bancos tendrán, durante el 2023, una mayor flexibilidad para seguir apoyando a deudores con problemas de pago o con atrasos en los créditos ante la alza en las tasas de interés.
No obstante, según Fernández, la tasa básica pasiva podría estar llegando a su techo, y a partir del segundo semestre del 2023 empezaría una reducción, debido a la desaceleración de la inflación en los últimos meses y el aumento considerable de la tasa de política monetaria realizado por el Banco Central.
Fernández también afirmó que los intermediarios financieros tienen muy buena liquidez en colones, lo que reduce el costo de captación. El exgerente del BCR resaltó como otros factores que el Ministerio de Hacienda no ha presionado tanto el aumento en las tasas de interés, debido a que no ha tenido necesidad de aumentar la demanda de colones.
LEA MÁS: Fondos de pensiones cerraron 2022 en rojo: cinco de seis operadoras frenaron caída
“Pareciera que ya llegamos a un techo de la tasa básica pasiva en colones, por lo que podríamos observar, después del segundo semestre del 2023, cierta reducción que podría ir muy en paralelo con lo que pueda ocurrir con las tasas de interés internacionales”, explicó Fernández.
Por su parte, Juan Pablo Arias, economista de la Bolsa Nacional de Valores (BNV), coincidió en que la tasa básica pasiva podría iniciar una tendencia a la baja a partir del segundo semestre del año, aunque consideró que los aumentos pueden mantenerse al menos durante los primeros meses del año.
“Es probable que esa tasa siga incrementando, por lo menos durante el primer trimestre del año, después se mantenga estable en el segundo trimestre y podríamos esperar una tendencia leve hacia la baja a partir de junio o julio”, explicó Arias.